En las últimas horas se ha vuelto a hacer viral a través de los grupos de cazadores unas imágenes que Jara y Sedal compartió el 22 de enero de 2019 y que ya entonces se hicieron virales: se trataba de un vídeo en el que se puede ver a un jabalí sin jeta comiendo ante la atónita mirada del camarógrafo. El animal se encontraba en una zona junto a una charca donde alguien había arrojado comida, posiblemente maíz. Por este motivo, el maltrecho animal no necesita hozar para alimentarse, de ahí que a pesar de que alguien le grabe a plena luz del día desde un vehículo, el animal no se espante.
El joven suido mira en varias ocasiones hacia la cámara, pero no tiene la más mínima intención de abandonar el lugar. Aunque la deformación del hocico no le pone las cosas fáciles para sobrevivir, las imágenes demuestran la tremenda dureza de estos animales, capaces de sobrevivir a grandes heridas, traumatismos o situaciones como esta. Quizá por eso ahora, tres años después de la publicación inicial del vídeo, se haya vuelto a hacer viral. Y es que hay vídeos que nunca dejarán de sorprendernos.
No es el único ejemplar sin jeta que hemos visto
Este viejo animal también tuvo que soportar vivir sin la parte superior de su mandíbula. En las redes sociales, gracias a las que la imagen ha dado la vuelta mundo, se ha especulado mucho sobre la causa de esta malformación. Algunos han apuntado a la posibilidad de que se trate de disparo antiguo del que el animal se habría repuesto, otros aseguran que puede tratarse de las consecuencias de haber caído en la trampa de un furtivo.
Sea cual sea la causa, en lo que han coincidido todos los cazadores es en el gran calibre alcanzado en su trofeo. Sin duda un animal para recordar una y mil veces por el cazador que consiguió abatirlo a primeros de diciembre en el coto de Aller (Asturias).
«El jabalí más feo de España», cazado en Salamanca
El 1 de noviembre de 2019 fue cazado, en una montería celebrada en las cercanías de la localidad salmantina de El Maíllo, un jabalí con una jeta muy particular. El cazador, que prefiere mantenerse en el anonimato, señaló a Jara y Sedal que lo cazó junto a su hermano en uno de los puestos de la jornada cinegética llevada a cabo en un coto social. Así fue aquel día.
