Como todo en la vida, las redes sociales, además de sus muchos aspectos positivos y sus facilidades en cuanto a la comunicación, también tienen otros negativos que pueden dejarnos ante escenas realmente delicadas. Un ejemplo de ello lo vamos a conocer a continuación, con la misiva que ha recibido una joven pastora para que abandone su actividad en estas plataformas.
Así lo ha contado en su canal de YouTube Nazaret Martín Crespo, uno de los rostros del mundo rural más conocidos en las redes sociales. «He recibido una carta que os voy a leer ahora», ha comenzado contando a sus seguidores. «Yo la he leído y se me han puesto los pelos de punta y la piel de gallina».
Antes de esto, Nazaret ha recordado un vídeo anterior en la que se quejó públicamente del trato que recibió en urgencias cuando acudió hace aproximadamente un mes al haber pasado varios días sintiéndose muy cansada. En esta ocasión aseguró que la atendieron en la calle y tan solo la mandaron a la farmacia, sin hacerle ningún tipo de exploración.
El contenido de la carta
Justo esto fue lo que desencadenó que, días después, recibiera una carta del Servicio Extremeño de Salud, según aparece indicado en la misma. A continuación y tras haber explicado a todos sus seguidores la situación previa a la que responde dicho texto, Nazaret ha comenzado leyendo el contenido del escrito:
«Estimada señora, nos ponemos en contacto con usted para indicarle que ejercer la profesión sanitaria lleva implícito un componente de servicio de trabajo hacia los demás y que, por este motivo, la aparición o el ejercicio de la violencia, en cualquiera de sus manifestaciones, agresión física, verbal, amenazas o insultos, por parte de una persona usuaria del sistema de salud, de un familiar o de un acompañante, dirigida a cualquier personal sanitario, es una lacra que afecta a la actividad sanitaria, a la sanidad de estas personas y a la indispensable relación de mutua confianza que debe existir entre un personal sanitario y su paciente».
«Aquella persona que ejerce una agresión contra un profesional sanitario podrá encontrar que eso está justificado, pero lo cierto es que en ningún caso existen motivos para tal acción, pues la violencia nunca es el camino».
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«Por ello, le recordamos que cualquier queja o malestar que usted pueda tener como usuario tiene sus adecuadas formas de expresión y manifestación, las cuales son oportunamente atendidas y respondidas a quien las formula por parte de la atención sanitaria». Sobre esto, Nazaret ha puntualizado que «jamás» le han contestado a ninguna de sus reclamaciones.
«Con independencia de las repercusiones que, desde el punto de vista legal pueda tener una acción agresiva, le instamos a que siempre acuda a esas vías legales y nunca a la realización de un acto violento contra un profesional sanitario», concluye la carta.
