Las denuncias por furtivismo en España han descendido notablemente desde el año 2007. Concretamente, un 52.68%, según los datos publicados por el Gobierno recientemente y consultados por Jara y Sedal. Hace unos meses, el diputado de EH Bildu Jon Icarritu Garcha realizó una pregunta escrita al Congreso en la que se interesaba por el número de denuncias de furtivismo interpuestas en España.

En su contestación, realizada el pasado mes de abril, el Gobierno aportó los datos que figuran en los archivos de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, aclarando que fue en 2007 cuando se informatizó este tipo de información, por lo que se desconocen las cifras previas. A pesar de esto, los números que ahora se han hecho públicos son muy reveladores, mostrando una tendencia descendente muy marcada en todas las comunidades autónomas de España.

Si analizamos las cifras generales, vemos que los delitos por furtivismo y las infracciones administrativas a las diferentes normativas autonómicas de caza en el año 2007 ascendieron a 12.156, mientras que en 2020 fueron de 6.404. Se trata de una extraordinaria noticia para la conservación de la Naturaleza en general y para los cazadores en particular, a los que muchas veces se criminaliza injustamente desde determinados sectores ecologistas o animalistas, tratando de hacer ver que el furtivismo y la caza son lo mismo.

Si quieres conocer cuál ha sido la evolución del furtivismo en tu provincia desde 2007 puedes descubrirlo en el siguiente enlance.

Evolución del número de delitos de furtivismo en España.
Evolución del número de delitos de furtivismo denunciados en España.

La lucha de los cazadores contra el furtivismo

Es posible que estos datos también sean el resultado de la persecución del furtivismo por parte del colectivo cazador. En los últimos años, algunas federaciones de caza como la andaluza han emprendido una cruzada contra este tipo de delincuentes, llegando a sentar en el banquillo a algunos de ellos. El caso más reciente es el de un furtivo que mató un lince en Doñana, por lo que la Federación Andaluza de Caza se personó como acusación particular.

Además, la FAC pidió a las administraciones que doten de más medios, humanos y materiales, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y especialmente a los Agentes de Medio Ambiente, para combatir estos delitos.

Una lucha que ha llegado a la RAE

En enero la Federación Andaluza de Caza y Jara y Sedal firmaron un acuerdo para llevar a cabo iniciativas de comunicación que ayuden a mostrar la verdadera imagen de la actividad cinegética a la sociedad no cazadora. Bajo el título ‘La Naturaleza de la Caza’, este proyecto lanzó la campaña #FurtivearNoEsCazar.

El objetivo de la misma es que la Real Academia de la Lengua Española registre la palabra «furtivear» en su diccionario, un término que actualmente no se encuentra entre sus páginas. Tan sólo aperece en el Diccionario del Español Jurídico, una obra destinada especialmente al ámbito del derecho y no al público general.