Un macabro hallazgo ha conmocionado a los vecinos de Proaza, un pequeño pueblo asturiano. Esta mañana, unos transeúntes han alertado a las autoridades de que había una cabeza seccionada de un lobo y la cola del mismo animal colgando de un puente peatonal situado a un kilómetro del famoso cercado de las osas Paca y Tola, símbolo de la conservación de la fauna salvaje en la zona.

Hasta el lugar se han desplazado agentes del SEPRONA de la Guardia Civil, que han retirado los restos del animal y han abierto una investigación para esclarecer los hechos. Según han informado fuentes del instituto armado a La Nueva España, tratarán de averiguar quién o quiénes son los responsables de este acto de vandalismo, que podría constituir un delito contra la flora y la fauna.

La cabeza y el rabo del lobo hallados en Proaza. © La Nueva España

El lobo es una especie protegida en Asturias, donde se estima que hay unas 40 manadas, que suman alrededor de 300 ejemplares. Su presencia genera controversia entre el sector ganadero, que denuncian los continuos ataques de la especie a sus animales, y los ecologistas, que defienden su papel ecológico y su valor natural.

La cabeza del lobo ha aparecido colgada de un puente que forma parte de la senda verde de los Valles del Trubia, una ruta turística que recorre el paisaje y el patrimonio de la comarca. La estructura se encuentra en el tramo que une Villanueva con el cercado de las conocidas osas Paca y Tola.

El cercado de los plantígrados es una de las principales atracciones de la zona y un referente de la sensibilización ambiental. Paca y Tola son de los pocos ejemplares de oso pardo que se pueden ver en cautividad en España y reciben miles de visitas al año.