La tenca es un pez autóctono de la península ibérica que lleva pescándose desde hace ya mucho años en nuestro país y con miles de adeptos principalmente por lo divertido de su pesca y la peculiar picada que nos suele ofrecer a veleta. Es un pez que empieza a picar a mediados de primavera y sobre todo durante el verano. A su vez es un pez que le gusta mucho comer en zonas fangosas y con bastante lodo, es allí donde suele encontrar su alimento, llegando a enterrarse por completo para este menester.

Búscalas en zonas de lodo someras y soleadas

La tenca siempre ha tenido fama de ser un pez muy escurridizo que no siempre está por la labor de querer picar. Suele tener un letargo prologando en el cual su actividad pasa a ser prácticamente nula, pero es a mediados de la primavera cuando empieza a «despertarse» y comienza a buscar alimento. Es a partir de aquí y hasta mediados de otoño cuando podemos tentarlas.

Las zonas por las que se mueven son habitualmente fangosas, donde predomina el lodo y el cieno. Allí pasan el resto del día buscando su alimento. Es un pez que también suele buscar zonas someras donde el sol incida directamente, busca refugio del aire y sobre todo huye de zonas con corriente ya que no es un pez con aletas fuertes y grandes, por lo tanto no se caracteriza por tener una natación rápida.

Atento a la espadaña de las charcas

Una de las zonas donde poder localizar tencas son en charcas, pequeños lagos o zonas estancadas de agua. Allí se encuentran, ya que son lugares donde proliferan los insectos y microorganismos necesarios para su desarrollo y alimentación.

Hay charcas que se hicieron en su momento de forma artificial para que el ganado pudiera beber e incluso se formaron de forma natural. Aquí es donde las tencas se encuentran como en casa, primero porque hay el suficiente alimento para subsistir y también porque no hay depredador natural que pueda hacerles ningún tipo de daño.

En aquellas charcas donde se encuentra el cangrejo, la tenca podrá compartir parte de su habitat, ya que el cangrejo se alimenta muy bien en zonas cenagosas al igual que las tencas. La tenca tiene una piel con ausencia de escamas, esto le permite moverse y rozarse por aquellos terrenos que no tengan demasiados obstáculos.

Por ello siempre buscarán los lugares próximos a eneas o también conocidas como espadañas. La enea o espadaña suele estar en las proximidades de la orilla, albergando una gran infinidad de fauna, en la que sin duda alguna se encontrará la tenca.

Mejor lo natural

La tenca es un pez que desde siempre ha picado muy bien al gusano y a la lombriz. Por ello que son los dos mejores cebos que podéis darle. Sin duda alguna el asticot puesto en nuestro anzuelo del número 14 ó 16 o bien una buena lombriz en un anzuelo del 12 hará las delicias de nuestras amigas.

Si puedes, combina los asticots, ya que en la actualidad hay asticots de varios colores, los tenemos desde el clásico blanco de toda la vida hasta los rojo intenso, el naranja fluor y hasta también azules. Consulta en www.cebosramiro.com y verás la variedad de gusanos y lombrices que hay en la actualidad. ¡Quedarás sorprendido de su efectividad y la calidad de éstos!

Una buena técnica de pesca para pescar tencas es la pesca a la inglesa. Con esta técnica, podéis siempre jugar con las distancias y sobre todo con las profundidades. Además, la picada a la inglesa te dejará con la boca abierta, es realmente bonita ver como se lleva la veleta pegada y cuando menos te lo esperas la va bajando lentamente hacia el fondo. ¡Estas picadas se te grabarán en la retina de por vida!

Un consejo; si decides pescar con lombriz, no dejes demasiada cola colgando de vuestro anzuelo. La tenca es un pez que en lugar de succionar tiende más a chupar. Por eso que conviene que metáis bien la lombriz en vuestro anzuelo tapándola casi por completo, o por el contrario corta un trozo de lombriz en el caso de ser ésta demasiado larga.

Un lugar privilegiado: la Santa Espina

Hay un lugar privilegiado donde se albergan infinidad de tencas y que es un verdadero paraíso para pescarlas. Este lugar es el embalse de la Santa Espina, situado en la provincia de Valladolid. Un coto de pesca de tencas donde su gran biodiversidad y gran belleza, hará que te envuelvas en él como otra parte más de aquel idílico escenario.

La Santa Espina es un embalse en el cual se albergan una gran multitud de tencas de un tamaño bastante interesante. Es un embalse pequeño en el cual sólo se permiten por cada día de pesca seis pescadores y un máximo de seis capturas por pescador y día.

Allí puedes pescar tencas con la técnica que mejor te guste, pero sobre todo con la boloñesa, inglesa o enchufable es cómo mejor se te dará. Pon una buena lombriz o una ristra de asticots y échales un puñado de éstos con frecuencia para atraerlas a tu pesquil.

Si puedes pega unos pocos de asticots con goma arábiga para que puedas jugar un poco con las diferentes zonas por donde las tencas están comiendo. Daros cuenta que la tenca suele comer en diferentes profundidades. Así lanzar gusanos sueltos te dará una idea de por donde suelen estar comiendo.

Por último, en la Santa Espina podrás envolverte con el entorno y la belleza de su paisaje, un lugar para el relax y sobre todo para disfrutar de la pesca de la tenca.

Buena pesca amigos.