En los últimos meses, la escasez de cartuchos de caza ha generado preocupación entre los cazadores y la industria armera. Uno de los principales factores detrás de esta problemática es la falta de nitrocelulosa, un componente clave en la fabricación de pólvora para municiones. La nitrocelulosa, un material altamente inflamable utilizado desde hace más de un siglo en la producción de explosivos y pólvora, ha visto una disminución en su disponibilidad debido a problemas de producción y distribución global.
La pólvora de nitrocelulosa es una pólvora de combustión ofensiva o progresiva. En el momento del encendido, la carga se transforma,
casi sin humo y sin residuos, en un gran volumen de gas, que otorga la energía al cartucho. La presión del gas, la velocidad, la dispersión de los perdigones, el retroceso y el funcionamiento del cartucho en escopetas automáticas dependen, en gran medida, del tipo y de la cantidad de la pólvora.
La nitrocelulosa, en crisis
La crisis de la nitrocelulosa se ha intensificado por varios motivos. En primer lugar, las restricciones medioambientales más estrictas sobre la fabricación y transporte de este químico han reducido el número de plantas capaces de producirlo. Además, el aumento en la demanda de materiales explosivos por parte de sectores como la defensa y la minería ha competido directamente con el suministro destinado a la industria de los cartuchos de caza.
Algunos expertos también señalan que los problemas de logística derivados de la pandemia, sumados al encarecimiento de materias primas a nivel global, han empeorado la situación. La producción limitada de nitrocelulosa ha generado cuellos de botella en la fabricación de cartuchos, afectando tanto a los productores como a los cazadores.
Aumento de precio de los cartuchos de caza
El impacto es notable en varias regiones del mundo, y en algunos lugares los cazadores ya se han visto obligados a reducir su actividad debido a la falta de munición. A su vez, esta escasez ha disparado los precios de los cartuchos, lo que dificulta aún más su compra. La industria armera está buscando alternativas, como incrementar la producción de nitrocelulosa en plantas locales o explorar el uso de nuevos materiales sintéticos. Sin embargo, estas soluciones requieren tiempo y la implementación de nuevas tecnologías, lo que significa que la escasez de cartuchos podría prolongarse en los próximos meses.
Así son los peculiares cartuchos de caza cargados con dos tipos de perdigones distintos
Los cazadores europeos, por ejemplo, ya han expresado su preocupación, instando a los gobiernos correspondientes a facilitar soluciones a esta crisis que amenaza con paralizar parte del sector a corto plazo.