Después de cuatro intentonas, Josep Bonet Capell y Miguel Campabal Fernández lograron abatir este magnífico corzo con una particular cuerna. Ocurrió en el prepirineo de Lérida y los cazadores nos cuentan cómo lo consiguieron.
7/4/2019 | Redacción JyS

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El animal contaba con una curiosa cuerna de 8 puntas. / M.C.

Josep Bonet Capell, un cazador catalán de 60 años, consiguió abatir a finales del pasado mes de abril un corzo que no olvidará, ya que el trofeo… ¡tenía una cuerna con 5 puntas y otra de 29 centímetros! El cazador es natural de Lérida pero ese día cazaba en la zona de El Solsonés, en pleno prepirineo de la misma provincia. Nos cuenta cómo lo cazaron.
Durante las jornadas empleadas para abatir este sensacional ejemplar, Giusep Bonet estuvo acompañado de Miguel Campabal Fernández, de 45 años, su gran compañero en los días de caza. «Probablemente el trofeo llegue a ser medalla de oro» tras su homologación, ha defendido Bonet Capelli a Jara y Sedal.

A la cuarta, la vencida

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Giusep Bonet Capelli, con el corzo. / M.C.

Bonet nos cuenta que ya habían abatido otro corzo que dio finalmente medalla de oro tres días antes, así que decidieron seguir moviéndose por la misma zona y dieron con otro magnífico. «Lo vimos una tarde, pero no le pudimos entrar por lo complicado del terreno», explica. «Luego le hicimos una espera, a unos 170 metros, pero con el sitio en malas condiciones y con el aire a favor fue imposible acercarnos lo suficiente», relata el cazador.
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El corzo, desde otra perpectiva. / M.C

Al siguiente día lograron dispararle tras otra entrada en la que consiguieron acercarse al cérvido, pero fallaron de nuevo. Ya iban tres intentonas. Dejaron un día más de reposo y, a la cuarta, llegó la vencida: de un único disparo tumbaron al magnífico corzo, que cayó al instante. Para ello, utilizó un rifle Bergara BA13 -calibre Winchester .243 Winchester- con munición Geco Express.

Ya se iban al coche cuando apareció de nuevo

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Giusep Bonet Capelli utilizó un rifle Bergara BA13 para abatir el magnífico corzo. / M.C.

«A otro corzo le haces lo que le has hecho a este y no lo ves más hasta el año que viene», afirma entre risas el cazador. «Ya dábamos el aguardo por terminado, nos íbamos para el coche, nos dimos la vuelta y… allí estaba el corzo», relata sobre el momento del lance. «Íbamos vestidos de pies a cabeza, camuflados y le pudimos entrar bien. Fue un disparo a la altura de la paletilla, tocando la zona de la columna y se quedó en el sitio», añade.
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El puesto desde el que esperaron a que el animal apareciera en la siembra. / M.C.

Además, un amigo veterinario de Miguel Campabal comprobó que el animal tenía cuatro años de edad y analizó su cuerna: «Realmente es alucinante, además de por las puntas de la cuerna derecha y lo larga de la izquierda, por el color blanquecino que tiene. Es muy bonito», explicó. También destaca que era un corzo «pequeño de tamaño» a pesar del «tremendo trofeo» que llevaba encima.

El otro descomunal corzo de Jaime Toscano

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Este corzo dio 210,38 puntos/ .J.T.

Este lunes fue noticia en Jara y Sedal cómo Jaime Toscano Pérez, joven cazador y orgánico de 26 años de edad y natural de Jerez de la Frontera (Cádiz), conseguía cazar el pasado 10 de abril en un coto aragonés y junto a un cliente un monstruoso corzo que probablemente alcance la octava posición del ránking nacional.
Las primeras mediciones, después de cerca de un mes en el que el trofeo ha permanecido secándose, arrojan la friolera de… ¡210,38 puntos! Te contamos en este enlace la historia al completo.