Según ha informado hoy La Nueva España, un gijonés que sufrió un accidente con su vehículo acudió a la Comandancia de la Guardia Civil a denunciar que un jabalí se había cruzado en su camino. Sin embargo, la investigación del instituto armado reveló que ningún animal había sido el responsable del choque y ahora ha sido condenado a cuatro meses de prisión por estafa.
Tal y como describe el mismo medio, el hombre tenía la intención de que el seguro le cubriese los gastos del siniestro, por lo que se le ocurrió decir que había colisionado con un jabalí y así no tener que gastar ni un euro. La jugada, según el citado medio, le salió muy mal: ha sido condenado a cuatro meses de cárcel por haber tratado de estafar a la compañía de seguros.
Una práctica fraudulenta que se mantiene año a año
La Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras aseguraba en marzo de 2019 -fecha en la que otro conductor simuló también haber colisionado con un jabalí– que el fraude en las aseguradoras es una práctica que se mantiene año tras año. El responsable de la lucha contra el fraude de esta patronal, Miguel Ángel Vazquez, dijo que «los casos más habituales son esos en los que sí que ha habido siniestro, pero donde la persona involucrada exagera los daños». En segundo lugar están los accidentes que suceden en circunstancias que la aseguradora no cubre, por ejemplo, las carreras clandestinas. En estos casos, los conductores intentan convencer a la compañía que el accidente se ha hecho en circunstancias totalmente distintas. Sería con mucha probabilidad lo que ha ocurrido con este vecino de Gijón. Por último, aquellas personas que se inventan un accidente con la misma intención: cobrar el seguro.
