En los últimos días se ha hecho viral el vídeo de una cierva agonizando en el sur peninsular con los síntomas que podrían asemejarse a los de la enfermedad hemorrágica epizoótica, que en los últimos años ha matado a decenas de ungulados en nuestro país, ya que sus consecuencias son fatales para la fauna silvestre. La actitud de la cierva define alguna de la sintomatología de esta enfermedad, caracterizada por fiebre, anorexia, dificultad respiratoria, edema severo de la cabeza y el cuello, lesiones en lengua y paladar, indiferencia hacia los humanos y, en etapas más avanzadas, hemorragia de los orificios corporales.

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No obstante, no se puede asegurar que este cérvido sufra la enfermedad hemorrágica epizoótica. En palabras a este medio del veterinario Carlos Díez, miembro de Ciencia y Caza: «con estas cosas hay que ser cautos y habría que valorar más aspectos para diagnosticar, pero en principio no parece que se trate de la enfermedad». Asimismo, expone que hasta ahora esta enfermedad solo se ha declarado oficialmente en Andalucía.

«Normalmente la EHE provoca edemas en la cabeza y cuello (se hinchan por acumulación de líquido), suele haber anorexia y los animales están más delgados. Si el animal no se muere de forma sobreaguda suelen aparecer hemorragias y heridas en la boca. En ambos casos la mortalidad es muy alta igualmente. Habría que hacer necropsia y tomar muestras y mandar al laboratorio para concretar aunque tampoco se podría descartar al 100%», indica el veterinario sobre este caso concreto.

Como hemos citado en otras ocasiones en este medio, la enfermedad hemorrágica epizoótica o EHE es una enfermedad vectorial infecciosa no contagiosa, transmitida por insectos del género Culicoides que afecta a animales rumiantes silvestres y domésticos, si bien en ningún caso afecta al hombre. Por el momento no existe cura ni tratamiento para la enfermedad, por lo tanto, es necesario prevenir la propagación del virus a áreas no afectadas y evitar la afección por parte del ganado.

Puede afectar también a gamos y corzos

En el ganado vacuno puede producir afecciones moderadas, en el caso del ovino es susceptible a la infección y el caprino es muy poco susceptible a esta. No obstante, se trata de una enfermedad que afecta gravemente a los ciervos -como así lo muestra este vídeo- y que puede afectar también a gamos y corzos.

Aunque esta enfermedad ha circulado históricamente en América del Norte, Australia, Asia y África, nunca había sido detectada en España ni en la UE hasta que el 10 de noviembre de 2022 las autoridades italianas comunicaron la detección del virus en explotaciones de ganado bovino en la isla de Cerdeña y más tarde en Sicilia. Ocho días después saltaba la noticia del primer foco detectado en nuestro país.