El cazador cordobés Fernando Bautista Porras, de 25 años de edad, ha abatido junto a un amigo un descomunal ciervo de 19 puntas y una enorme magnitud de su trofeo en un rececho en la fina ‘La Zarzuela‘, en la provincia de Badajoz.
El cazador, seguidor de Jara y Sedal, ha narrado a este medio todos los detalles de un lance que no olvidarán jamás. «Estuvimos desde las 7:00 horas de la mañana recechando», explica el joven, que relata que en realidad era «el sueño de un amigo que pasó a ser mi sueño».
«Nos levantamos a las 4:30 de la mañana para prepararnos y salir rumbo a cumplirlo. Llegamos a la finca sobre las 6:41 de la mañana entre bromas y gracias y ya nos estaban esperando para comenzar un rececho que no olvidaremos nunca», señala el cazador cordobés. «Quizás a mucha gente se le olvida que recechar es andar, es seguir al animal, en una pelea cuerpo a cuerpo, en su medio natural, libre. Pero nosotros veníamos a eso, a meternos en el fango», confiesa el cazador sobre el rececho.
Tras varias horas andando, por fin lo vieron
Fernando Bautista asegura que «vimos muchísima caza, toda la mañana intentando acercarnos, despacio, de rodillas, tapándonos, escuchando, viendo y sintiendo todo lo que pasaba a nuestro alrededor», asegura. Y tras horas de andar por fin lo vieron: «Era un grupo de cuatro animales de máxima calidad. Intentamos acercarnos para valorar mejor ya que había cuatro ‘pavazos’ juntos», resalta el cazador.
«Notamos la tensión, la falta de saliva, la respiración y el corazón se nos aceleraron de momento», narra Bautista. Su amigo le dijo: «Ahí está, ya lo tienes, apóyate bien, respira y aprieta lentamente el gatillo». Y así lo hizo.
El resultado fue este precioso animal «que no olvidaremos jamás», dice Fernando. «Me quedo con la alegría de mi gran amigo, con esa cara de felicidad, ese abrazo en el que nos fundimos emocionados los dos, el sentimiento que nos recorrió por el cuerpo de haber hecho las cosas como se deben hacer. Realmente increíble lo que vivimos juntos», concluye Bautista.
Un joven caza un ciervo con un inusual y extraño trofeo
El jovencísimo cazador andaluz José María Romero, conocido por su entorno familiar y de amigos como ‘Pipe’ Romero se hizo ‘novio’ en el mundo cinegético el pasado mes de noviembre con un venado que tenía tres cuernas y doce puntas y que abatió en una finca ubicada en las cercanías del pantano de Zufre, en la provincia de Huelva. Te lo contamos en este enlace.
Otro extraño ciervo con tres cuernas en Cuenca
El joven guadalajareño José Manuel Roa Benito abatió un ciervo… ¡con tres cuernas! Ocurrió durante una montería en la localidad conquense de El Pozuelo y Jara y Sedal se puso en contacto con el joven cazador, que narró la historia de cómo logró hacerse con este ejemplar tan singular, que además tiene 11 puntas. Te la contamos.