Un grupo de cazadores franceses de la localidad de Saint-Agathon, en el departamento francés de Côtes-d’Armor, se encontró con una sorpresa inesperada el pasado domingo. En lugar de localizar liebres o conejos, que a priori es lo que buscaban, descubrieron una plantación de cannabis escondida en un pequeño páramo detrás de un bosque.
Según han informado medios locales, los cazadores avisaron a la gendarmería, que acudió al lugar y comprobó que se trataba de 60 plantas de marihuana bien cuidadas y regadas por un sofisticado sistema. Este tipo de plantas ilegales estarían destinadas al consumo de drogas por lo que los gendarmes, tras agradecer a los cazadores su hallazgo, tomaron una foto de la plantación y procedieron a destruirla.
Cazadores de Zamora descubren una plantación de marihuana durante una batida de jabalí
Los agentes franceses ya han iniciado una investigación para dar con los responsables del cultivo clandestino, que se enfrentan a graves sanciones por violar la ley francesa.
