El siguiente vídeo ha sido filmado en un coto de la provincia de Granada y ha sido enviado por un seguidor a Jara y Sedal. En él se ve a un imponente macho montés afectado por sarna y totalmente inmóvil en el suelo. El cazador que graba las imágenes, que prefiere preservar su identidad, se acerca hasta el animal, pero a este ya le quedan pocas fuerzas y no puede ni moverse. De hecho, el macho montés levanta la cabeza tan sólo al final de la grabación.
La sarna es una dermatosis muy contagiosa, con un claro efecto estacional. Lo habitual es que los ácaros muestren su máxima actividad en otoño; sin embargo, en climas templados suele observarse un incremento considerable de la prevalencia a finales del invierno, como puede ser este caso.
Como también ocurre con el jabalí, el macho montés es una especie sin depredadores locales, que se está reproduciendo en un hábitat cada vez mayor, dado el incremento de masa forestal a su vez ligado al creciente abandono rural. Por tanto, si no existe el control cinegético de estas especies, acaban muriendo por este tipo de enfermedades.
Una enfermedad difícil de curar en animales silvestres
La aplicación de tratamientos en fauna silvestre resulta compleja y tiene algunas limitaciones. En todo caso, el fármaco de elección es la ivermectina, un antiparasitario de amplio espectro que puede aplicarse por vía oral, subcutánea o sobre la piel (vía tópica).
En cualquier caso, una adecuada gestión preventiva, basada entre otros aspectos en una buena planificación y control óptimo de densidades, junto con la restauración de los equilibrios en los ecosistemas serán sin duda las principales herramientas para la prevención de la aparición de la enfermedad.
De Granada a Cádiz: la sarna mata al 90% de las cabras de un coto gaditano que ya alertó hacía meses del problema
Cazadores de la provincia de Cádiz denunciaron el pasado año la muerte de decenas de cabras montesas por sarna. Tal y como narró para Jara y Sedal el presidente de la Sociedad de Caza y Pesca de Benamahoma, Pablo Menacho Casillas, los casos comenzaron en el mes de noviembre de 2019, cuando abatieron al primero de los machos monteses que registraron con esta enfermedad. Así ocurrió.