El vídeo que a continuación te mostramos ha hecho durante meses las delicias de los amantes de la caza del zorro en redes sociales. Las imágenes muestran a un cazador que reclama con el método de la chilla a los zorros que pueda haber en la zona con el fin de realizar un control de depredadores, una tarea muy necesaria en los cotos de caza para mantener una población estable.
En cuestión de segundos se pueden divisar a lo lejos unas orejas de raposo entre la siembra donde se encuentra el cazador. El animal muestra curiosidad por el sonido, que simula el lamento de un conejo, y se va acercando cada vez con más curiosidad. Tanto se arrima al cazador que este decide levantarse, pero ni por esas el animal se retira. Y no sólo no se va, sino que continúa acercando al hombre.
Es esta actitud la que ha llevado a muchos cazadores en las redes a preguntarse acerca de la procedencia del animal. Unos apuntan a que podría tratarse de un animal criado en cautividad y posteriormente liberado, y otros afirman que se trata de un ejemplar joven e inexperto.
Hace la chilla y caza con arco un zorro con un espectacular rabo
El joven Gonzalo Roca de Togores, de 22 años, no esperaba que, tras hacer la chilla durante una jornada cinegética en su finca situada en Ávila, cazaría con arco un extraño ejemplar de zorro con la cola negra. Fue hace unos meses, pero es ahora cuando recuperamos esta peculiar historia que el propio protagonista relata a Jara y Sedal.