Un cazador natural de la localidad jiennense de Andújar abatió hace unos días en las cercanías del municipio valenciano de Requena un monstruoso jabalí de unos 100 kilos de peso que contaba con unas defensas de infarto.
El lance lo protagonizó en una montería en la finca de La Castellana, organizada por SierraCaza: «Fue muy bonito porque el animal entró chanteado, sin perro, y lo vi justamente cuando lo tenía apenas a veinte metros», explica A.M. -que prefiere mantenerse en el anonimato- sobre cómo el animal le entró a media mañana al puesto.
«Venía hacia mí, y cuando encaré el arma, le disparé debajo del cuello a unos diez metros de distancia», añade. «Disparé en dos ocasiones más hasta que cayó muerto. Fue un lance limpio, porque apenas había vegetación delante», señala el cazador jiennense. «Además, venía solo, como saliéndose de la mancha», añade.
100 kilos de peso y unas tremendas defensas
El animal contaba con un trofeo imponente: «Es espectacular; tiene 2,7 centímetros de ancho, y probablemente será medalla de oro. De largo tenía unos 9 centímetros por fuera», explica el cazador sobre un animal que «rondaría los 100 kilos de peso».
Además, «era un jabalí viejo, que incluso tenía dos heridas en cada lado de haber luchado contra otros machos. Era todo un superviviente», reconoce. Durante el lance, A. M. utilizó un rifle Sauer 202 en calibre .30-06 Springfield cargado con munición Sako de 180 grains.