El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha presentado recientemente una Estrategia Nacional de Gestión Cinegética con la que pretende aplacar el descontento del mundo rural en general, y de los cazadores en particular, y tras el anuncio de dos manifestaciones impulsadas desde el sector cinegético en Madrid. Se trata de un texto que inició el periodo de consulta pública el pasado 5 de enero y concluirá el próximo 2 de febrero.

La disposición adicional cuarta de la Ley 21/2015 de 21 de julio, de modificación de la Ley 43/2003, de Montes dice que el Ministerio de Agricultura, con la participación de las comunidades autónomas, elaborará una Estrategia Nacional de Gestión Cinegética que constituya el marco orientativo y de coordinación para la ordenación a escala estatal, cuyas disposiciones podrán ser incorporadas voluntariamente por las Administraciones competentes en su normativa cinegética.

El borrador de la Estrategia, ya desarrollado, explica que se presentan oportunidades para la continuidad del aprovechamiento de la carne de caza como un producto de alta calidad en cuanto a nutrientes, naturalidad y su degustación como producto gourmet.

Revisando el texto en profundidad encontramos que las propuestas y actuaciones sobre la carne de caza están reflejadas en los Objetivos 1, 2 y 5 de la Estrategia y son las siguientes:

  • Promover las medidas necesarias para fomentar y facilitar la comercialización y el consumo de carne de caza en condiciones adecuadas.
  • Impulsar la habilitación de salas de despiece para facilitar la comercialización de la carne de fauna silvestre.
  • Facilitar la posibilidad de vender o donar la caza y la transformación de las canales en el marco de un mercado de proximidad o a nivel local.
  • Promover la exportación de la carne de conejo como carne ecológica.
  • Fomentar la comercialización de la carne tanto anivel de proximidad, como a nivel nacional e internacional.
  • Promover la comercialización y el consumo de carne de caza, y valorización de SANDACH derivados de actividades cinegéticas, según la normativa vigente.
  • Difundir de las características de la carne de caza como carne ecológica, sana, segura, saludable y sostenible, para fomentar su consumo entre la sociedad española y sus posibilidades como producto gourmet.
  • Promover jornadas gastronómicas de la caza para dar a conocer los sabores y cocina de la carne de caza y desarrollar acciones de promoción con los más pequeños.
  • Potenciar la carne de caza en las escuelas de hostelería, instruyendo a los Potenciar la carne de caza en las escuelas de hostelería, instruyendo a los que ofrece en la cocina, enseñando cómo trabajarla, innovadoras formas de preparación, para que los futuros chefs lo incluyan en sus cartas.

En resumen, es destable la importancia que se da al consumo de la carne de caza dentro de la Estrategia y que podamos ver entre los objetivos a cumplir que llegue a los mercados de proximidad, así como facilitar su venta y también las donaciones a entidades benéficas.

Resulta muy positivo que se reconozca el potencial que tiene la carne de caza entre los más pequeños de la casa, aunque se echa en falta que, además de reconocer que es una carne totalmente ecológica, que no se incluya dentro de la categoría de “slowfood” o “comida lenta”, ya que sin duda de incluirse la haría mucho más atractiva entre los chefs profesionales.