Así sobrevivían las familias de antaño en el monte: «Si no hubiera sido por la caza mucha gente no habría podido comer»
No hay nada como las redes sociales para viajar a tiempos pasados y conocer con detalle cómo era la forma de vida entonces. En este sentido, Eugenio Monesma es todo un experto. Esta vez, uno de sus documentales nos enseña cómo de duro era el día a día de la mujer rural de antaño.
Dicho trabajo audiovisual, en concreto, tiene como protagonistas a varios vecinos de la localidad de Valpalmas, en la provincia de Zaragoza. Fue grabado en 2010 y todos ellos recrearon cómo era el trabajo de estas mujeres en el medio rural.
Durante esta jornada, los habitantes zaragozanos revivieron una serie de actividades que antiguamente llevaban a cabo nuestras madres y abuelas.
Labores de la mujer rural de antaño
Entre ellas, cabe destacar algunas labores típicas, siempre con la característica indumentaria de la época. La iniciativa nació del Ayuntamiento y su objetivo era que las mujeres del pueblo puedan conocer cómo vivían hace años sus antecesoras.
El documental muestra cómo estas acuden a la fuente para llenar de agua los cántaros y los transportan de vuelta al pueblo bajo el brazo. Asimismo, detalla cómo elaboraban jabón casero a base de agua, grasa de los alimentos que ya no se iban a consumir, aceite usado y sosa cáustica. El proceso duraba un par de días.
También nos enseña cómo, cada semana, estas mujeres iban hasta el lavadero, siendo este una balsa, para, con ayuda de unas losas apropiadas para frotar la ropa con el jabón, hacer la colada.
Las tertulias de las mujeres rurales
Mientras los hombres iban por la tarde al casino, las mujeres se reunían en entretenidas tertulias que tenían lugar en el comedor de alguno de sus hogares. Cuando los maridos volvían a casa, ellas volvían a la cocina y preparaban todo para tener lista la cena.
Después de esto, una de las vecinas de la localidad zaragozana enseña las típicas vestimentas que utilizaban entonces para, por ejemplo, acudir a la iglesia. Por último, la recreación termina mostrando el artilugio del que hacían uso para tejer, el único ‘hobby’ del que hablan en todo el documental.