Los vecinos de Guardamar del Segura han amanecido esta mañana con una estampa inusual: nada menos que un tiburón de tres metros de longitud y 270 kilos de peso varado en su playa.
El alcalde de la localidad José Luis Sáez, ha informado del hecho a través de las redes sociales y ha confirmado que los testigos intentaron devolverlo al mar, pero que debido «a su estado de agotamiento, y posiblemente una enfermedad» el animal no pudo sobrevivir.
Sáez también ha confirmado que la Guardia Civil y la Policía Local se han puesto en contacto con el centro de recuperación en Valencia para que se hiciese cargo de su cuerpo y tratase de averiguar la causa de su muerte.
Las autoridades han señalado que parece tratarse de un tiburón zorro (Alopias vulpinus). Se trata de un tipo de escualo que suele nadar a profundidades de entre 30 metros y 45 metros y puede llegar alcanzar los 5 metros de longitud y un peso de hasta 360 kg.