La Junta de Extremadura solicita los datos de todos los cazadores que forman parte de las más de 300 sociedades locales para revisar si cumplen con la legislación vigente.
7/9/2018 | FEDEXCAZA
La Federación Extremeña de Caza considera muy preocupante la situación generada ante el requerimiento que la Junta de Extremadura ha enviado a las más de 300 sociedades locales de caza de la región, lo que ha provocado una gran incertidumbre e inseguridad en el sector. Una situación que FEDEXCAZA ya había advertido que ocasionaría numerosos problemas y situaciones de difícil solución.
Y es que la legislación que regula las sociedades locales de caza establece que únicamente pueden ser socios los naturales del municipio, los residentes en el mismo o los propietarios de terrenos integrados en el coto social, permitiendo la existencia como máximo de un 20 % de socios que no cumplan dichos requisitos.
Hasta la fecha han sido las propias sociedades las que han velado por el cumplimiento de estos requisitos, que persiguen preservar el vínculo de los socios hacia el pueblo, sin que hayan surgido incidencias significativas.
Sin embargo, recientemente la Junta ha modificado su criterio y ha reclamado los datos de todos sus asociados (con copias de DNI incluidas y en formato Excell) a las más de 300 sociedades locales de caza de la región, con la advertencia de que se deberán dar de baja todos los socios que no cumplan estas condiciones tal y como están establecidas.
El problema es que este nuevo criterio no reconoce la realidad del mundo rural, con muchas personas que, aún habiendo nacido en Extremadura, se han marchado de sus pueblos por razones laborales o personales, aunque regresan siempre que tienen ocasión, o con mucha población cuyo lugar de nacimiento es aquel en el que se ubica un hospital y no de donde es natural. Para FEDEXCAZA, esto puede suponer una ruptura radical del vínculo afectivo de muchos extremeños con sus lugares de origen y pone en grave riesgo la viabilidad de las sociedades locales de todos los municipios en los que no haya un hospital.
A todo esto se suma la inseguridad jurídica que supone a estas entidades sin ánimo de lucro la gestión de estos miles de datos personales y la duda de quién va a ser el responsable de custodiar y analizar esas informaciones para posteriormente revisar las miles de incidencias que a buen seguro se van a generar.
La Federación Extremeña de Caza lamenta que se haya llegado a esta situación. La Junta de Extremadura no ha escuchado las propuestas planteadas por la propia Federación, y espera que el Gobierno regional reaccione cuanto antes y de una solución adecuada a un problema innecesario que está provocando un gran nerviosismo entre los cazadores extremeños.