Francia está siendo la gran protagonista de la actualidad internacional en los últimos días. Esto se debe a la crítica situación por la que están atravesado los agricultores del país vecino, la cual ha desembocado en movilizaciones multitudinarias que están generando consecuencias en otros territorios.
Algunas de esas actuaciones con las que el mundo rural francés está mostrando su descontento han bloqueado carreteras y autovías del país, llegando a cortar el paso de los camioneros españoles que tienen que circular por esas vías.
Otras, en cambio, se dirigieron contra edificios públicos de relevancia o contra los propios supermercados. Hace unos días, desde Jara y Sedal contábamos cómo los agricultores de Francia llenaban de estiércol la fachada de uno de estos establecimientos.
Lo mismo hicieron en el mes de noviembre, pero dirigido a la puerta del edificio de la Administración. Ahora, la escena que vemos vuelve a tener como objetivo a las superficies de venta.
Los agricultores protestan contra el grupo Leclerc
Para entender la situación un poco mejor, es necesario saber que el desencadenante de todas estas protestas fue el aumento de los costes de producción, las diferencias de regulación con otros países europeos, los trámites administrativos, los impuestos, los controles y los daños de la fauna.
Así protestan en Francia los ganaderos cabreados: arrojando estiércol contra la Administración
Las imágenes que vamos a ver a continuación corresponden al pasado día 26 de enero. Fue entonces cuando varios grupos de agricultores expresaron su enfado contra el grupo Leclerc con actuaciones cerca de sus tiendas.
La razón es que aseguran que dicho grupo favorece los productos extranjeros para beneficiarse de costes más ventajosos. Los agricultores, ante estas acusaciones, han decidido pasar a la acción con escenas como esta en la que, con ayuda de sus tractores, levantaron el asfalto de los alrededores de una de sus tiendas para que los clientes no pudieran entrar.
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