Has tenido todo un año para elegir un buen lugar donde poder cazar con tus pájaros. Si has elegido un coto de caza donde todavía existe perdiz autóctona: de la de verdad, de la de toda la vida, ya sabes que no puedes ‘jugar’ con ella. Tienes que hacer las cosas como Dios manda si quieres que todo salga bien. Ten en cuenta estos aspectos para no cometer errores.
1. Conoce la finca
Tu obligación es conocer el terreno donde vas a cazar, especialmente en las fincas de caza mayor, y conocer muy bien la orografía del terreno de coto. La mayoría de estas fincas están ubicadas en sierras, montañas con abundante vegetación y muchas piedras con las que hay que tener cuidado. Controla la caza mayor en el entorno y ten en cuenta la existencia de águilas que puedan sorprender a tu pájaro durante la caza. Preparar el puesto en aquel sitio más adecuado para tu pájaro y para ti.
2. Prepara el puesto de reclamo
En estas fincas de caza mayor no suelen existir puestos naturales para cazar con el reclamo. Lo normal es que vayas con tu puesto portátil de lona y lo camufles entre la vegetación. Deja el coche bien escondido. Coge el arma, el pájaro, el zurrón, el portátil, una pequeña silla, el hacha, el tanto y busca aquel sitio más idóneo para tu pájaro y para ti siempre pensando que la perdiz autóctona conoce su terreno más que tu puedes conocer tu casa. Una vez elegido, camufla tu puesto portátil y el tanto donde vas a ubicar a tu pájaro con maleza natural de la zona sin hacer grandes destrozos en la naturaleza.
3. Posición del puesto y de tu perdiz roja
Los cánones en este tipo de arte de la caza con reclamo dicen que el puesto debe estar a 17 pasos de la ubicación del tanto donde estará tu pájaro. Aún siendo esto así, en mitad de la naturaleza eres tú quien tiene que controlar la distancia. Lo más importante es que el puesto donde vas a estar ubicado esté en posición superior al tanto, que siempre te dé a ti el sol en la espalda para que no te moleste y que la plaza donde está ubicado el tanto con tu pájaro esté lo más limpia posible de piedras sobre las cuales pudiera rebotar un plomo e impactar a tu pájaro, como así ha ocurrido en muchas ocasiones.
4. La seguridad
Mientras que estas preparándolo todo, el arma debe estar descargada. Una vez que has colocado bien a tu pájaro y te has metido dentro del puesto, es cuando la debes cargar y muy despacio ir sacándola por la tronera. Es en ese momento cuando ya le puedes quitar el seguro. A partir de ahora deja a tu pájaro trabajar, no le estorbes, apaga el teléfono para que no tengas llamadas ni escribas Whatsapp. Es el momento de disfrutar, de ver cómo trabaja tu pájaro en mitad de la naturaleza y… relajarte.
Aguanta dentro del puesto. Deja trabajar a tu reclamo. Si está cantando no lo interrumpas. Mi experiencia me dice que los mejores puestos han ocurrido pasadas las dos horas de canto. Después de todo un año de trabajo con los pájaros, disfruta al oír a tu pájaro hacer las cosas bien. Es tu momento.
