El accidente de caza ha tenido lugar este sábado, 15 de diciembre, en la localidad alicantina de La Nucía. Todo apunta a que el cazador tropezó y, al caer, se disparó su propia arma, recibiendo un tiro mortal en el tórax.
16/12/2018 | Redacción JyS

La Nucía, donde ha ocurrido el suceso, se encuentra cercano al término municipal de Altea. / Foto: David Revenga – Diario Información

Un hombre ha fallecido en un accidente de caza este sábado, 15 de diciembre, en la localidad alicantina de La Nucía después de tropezar y dispararse accidentalmente su propia arma. Tal y como han informado desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) a Diario Información, el suceso se ha producido a las 11.30 horas de la mañana.
La principal hipótesis del fallecimiento del hombre es que «ha tropezado y al caer se ha disparado su propia arma, recibiendo un tiro mortal en el tórax».
En el operativo han participado un Soporte Vital Básico (SVB), una unidad del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) y cuerpos de seguridad. Lamentablemente, las unidades sanitarias no han podido hacer nada por salvar la vida del cazador.

Accidentado inicio de diciembre para los cazadores españoles

El suceso de Segovia tuvo lugar el 6 de diciembre. / Foto: archivo

Varios han sido los accidentes de caza ocurridos durante los primeros días de diciembre en España. Sin duda, una de las partes más trágicas se la lleva el pasado Puente de la Constitución, en el que dos cazadores fallecieron por disparos accidentales en España. En el primero perdió la vida un cazador de 42 años tras recibir un disparo accidental de un compañero en la localidad segoviana de Cerezo de Abajo. Por otra parte, un cazador de 73 años de edad y vecino de Vitoria que participaba en una batida falleció también durante el puente según informó el Departamento vasco de Seguridad.
Otro de los accidentes más relevantes, afortunadamente sin fallecidos, acaeció en la localidad toledana de Illescas, donde un hombre de 69 años resultó herido en una pierna debido al disparo de una escopeta de cartuchos mientras participaba en una cacería. Por otro lado, un cazador de 66 años y vecino de la localidad cántabra de Molledo tuvo que ser evacuado por el helicóptero medicalizado tras sufrir un infarto cuando cazaba en la Reserva del Saja.

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