Es uno de los mejores ejemplos de que la caza ayuda a la conservación de las especies amenazadas en nuestro país. Además del lince, la cigüeña negra, el buitre negro o el águila imperial también se benefician del trabajo de los cazadores.
24/10/2017 | Redacción JyS

lince ibérico
El coto privado «La Garganta» es un ejemplo más de cómo la caza ayuda a la conservación de las especies.

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha confirmado que la finca «La Garganta», coto privado de caza enclavado en pleno Parque Natural Valle de Alcudia y Sierra Madrona, cuenta con la población de linces ibéricos en estado silvestre más importante del país, con más de treinta ejemplares.
Así lo ha asegurado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez, que el pasado viernes visitó esta finca, una de las más emblemáticas para la conservación de especies silvestres en España, entre ellas también el águila imperial ibérica.
Martínez recordó que este coto privado de caza conserva desde hace más de 30 años una de las poblaciones de linces más importantes de España, que se ha ido incrementando en los últimos años con el nacimiento de diferentes camadas hasta superar la treintena de ejemplares en la actualidad.
Martínez apuntó que el Gobierno regional se siente satisfecho de la gestión del patrimonio natural que se viene realizando desde hace décadas en este coto privado de caza, en permanente colaboración con la Junta. Especialmente, «gracias al aumento de las especies protegidas como es caso del lince ibérico, la cigüeña negra, el buitre negro o el águila imperial, además de un catálogo de vertebrados que llega a las 234 especies y de los diferentes hábitats, en un excelente estado de conservación, gracias a un modelo de gestión totalmente sostenible», ha valorado.
El equipo de la Administración junto a los gestores del coto privado de caza durante la visita.
El titular de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha destacado que el Gobierno regional «siempre» ha defendido la actividad cinegética sostenible en la región porque «representa un modelo de aprovechamiento y gestión de las especies y de sus hábitats».
«Esta gestión responsable, ha añadido, conlleva la conservación de estas especies, de los animales silvestres y del medio en su conjunto, como así reconocen entidades como la Unión Europea (UE) o la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza».

La clave de la conservación del lince es la caza

Por su parte, el administrador y gestor de la finca, Francisco Landaluce, ha señalado que tanto el anterior propietario, la familia Baviera, como la actual, la Westminster, con la colaboración de la Junta, siempre han tenido como objetivo principal la conservación de las especies silvestres, especialmente el lince ibérico, así como al águila imperial, «dos de las especies más amenazadas en España».
Así, ha apuntado que esta finca ha sido reconocida por la propia UE con numerosos premios por su labor en la conservación. Landaluce ha añadido que la clave para la conservación de estas especies emblemáticas es la gestión cinegética.
«Las grandes poblaciones de conejo y perdiz silvestre y su modelo de gestión sostenible con un mínimo impacto de la caza convierten a estas especies presa y a su entorno en el hábitat ideal para las poblaciones de linces e imperiales, entre otras muchas especies protegidas existentes en la finca», ha resaltado.