El pasado jueves se reunía la comisión estatal de patrimonio natural y acordaba por un estrecho margen incorporar al lobo en el listado de especies de protección especial, lo que traduce en la posibilidad de que el Gobierno prohíba su caza en los próximos meses. La medida contrasta con el modo en que gestionan los daños del cánido en otros países europeos como Francia o Alemania en los que, a pesar de contar con un número muy inferior de lobos, sí permiten su control.

A diferencia de España, donde el lobo nunca se ha llegado a extinguir, en Alemania los cánidos salvajes fueron erradicados hace 150 años. Un programa de reintroducción logró que en el año 2000 nacieran los primeros ejemplares en libertad. 18 años después, en noviembre de 2018, se censaron 73 manadas, lo que supone una tasa de crecimiento de la población del 30 por ciento. Según las estimaciones de la Asociación Alemana de Caza (DJV), en total ya viven más de 1.000 ejemplares en el país, y las previsiones son que esas cifras se dupliquen en los próximos tres años.

Los datos en cuanto a la población de lobos en España están desactualizados, puesto que las últimas cifras oficiales que se manejan son de 2014, cuando su población era mucho menor que en la actualidad. Aún así, esas cifras ya hablaban entonces de 297 manadas, lo que supondría unos 2.500 lobos. Pero desde entonces las poblaciones no han parado de crecer, por lo que con total seguridad la población española, como mínimo, triplicará a la alemana.

«Hacer romanticismo con el lobo no ayuda a nadie»

El pasado verano los lobos mataron a dos caballos en el municipio alemán de Nienburg. Las autoridades del distrito expidieron entonces un permiso especial para autorizar el abatimiento de alguno de los cánidos de la manada, según declararon entonces varios representantes políticos en el parlamento estatal de Hannover. 

Permitir la caza del lobo en el caso de ataque al ganado y de que genere daños «graves» es un máxima ahora en el país, que pretende mantener a raya este tipo de incidentes a pesar de contar con muchos lobos menos que España. Wiebke Knell, portavoz de caza y agricultura del Partido Democrático Libre alemán, criticó hace unos meses que el Gobierno alemán no tome medidas más duras contra el lobo: «Está matando un animal tras otro y, mientras, el Gobierno está alimentando a los pastores con subsidios insuficientes. Hacer romanticismo con el lobo no ayuda a nadie. Los ciudadanos necesitan saber dónde están los lobos y qué zonas son de riesgo, y mucho más ahora que las personas buscan relajarse en las vacaciones y caminan por la naturaleza».

Francia cazará unos 100 lobos en 2021

Francia y Alemania autorizan el control de lobos para proteger a los ganaderos de sus ataques. © Archivo

Por su parte Francia ha autorizado controlar alrededor del 19% de su población de lobos, estimada entre 528 y 633 ejemplares según el Departamento de Biodiversidad del país. En total, se dará caza este año a unos 100 lobos que provocan cuantiosos daños ganaderos. Hasta la fecha, hay también un centenar de áreas donde la presencia de lobos es estable.