El cazador Javier Martínez Solano y su amigo José Gabriel Sánchez, también amante del mundo cinegético, grabaron el pasado fin de semana una imagen un tanto peculiar: la de su yorkshire terrier cruzado corriendo detrás de un conejo como si fuese un galgo. La imagen la tomaron en las cercanías de su localidad natal, Corvera, en la Región de Murcia.
«Íbamos andando por un campo que tengo en las cercanías de Corvera y vimos un conejo encamado debajo de una mata. Yo le dije a mi amigo que grabase, sujeté al perro, tocamos un poco para que saliese al animal y soltamos al perro pensando que no iba a seguirlo… pero de repente vimos cómo recortó el conejo y se fue para adelante con él», explica aún emocionado el joven. «Llegó incluso a la parte trasera del pantano», indica.
El instinto cazador del yorkshire
Aunque en la actualidad la raza yorkshire se considera plenamente de compañía, esta raza inicialmente era de caza. Su labor como cazadores se debía a la búsqueda de un perro de dimensiones pequeñas durante la Revolución Industrial en Inglaterra que fuera capaz de encontrar y eliminar diversas plagas de roedores en granjas y minas.
Se trataba de perros capaces de entrar en pequeños hoyos, con una mandíbula potente, un olfato y oído agudo, además de un extenso pelaje que lo protege ante el ataque de otros animales. De ahí su origen cazador y, probablemente, el instinto que aún conserva este perro.
Un zorro corre una liebre como si fuera un galgo
Un usuario de TikTok ha grabado el instante en que un zorro intenta capturar a una liebre en mitad de un campo. En la filmación se puede ver al raposo tras ella mientras esta última trata de escapar en unos instantes, cuanto menos curiosos, por la rapidez con la que la rabona huye del depredador y la presteza con la que éste intenta alcanzarla.
