Recuerdo cuando empecé a pescar con un equipo reducido y pescaba; mejor o peor, pero siempre algo extraía. A día de hoy y en cualquier modalidad ya no basta con tener una caña, una carrete y algún que otro aparejo. ¿Hemos convertido la pesca en un negocio? ¿Hemos pasado a ser víctimas de nuestro ego y lo qué es peor, a querer únicamente pescar por el simple hecho de mostrar y enseñar nuestras capturas dejando a un lado la paz, sosiego y tranquilidad que da nuestra afición? Leed estas líneas y pensad sobre ello.

1/2/2020 | Juan Carlos García

Las redes sociales

¡Cómo nos gusta poner nuestras capturas y mejores fotos a los demás! Sí, es cierto que ya no lo podemos evitar. ¿Quién posee la captura más grande, la foto más original, peligrosa o exagerada? ¿A esto en la actualidad lo llamamos pescar? No digo que esté mal, pero conlleva una serie de problemas que observo a diario.

Lo primero es la dichosa envidia, que si esa foto está trucada, que si ese pez ya lo saqué yo antes que tú, que si el pez lo metes muy encima del objetivo de la cámara, que si no pesa lo que dices… un sin fin de situaciones que generan mil y un conflicto entre los que nos dedicamos a este maravilloso deporte.

Me gusta o no me gusta

En facebook todos los días aparecemos dando a demostrar nuestra valía como pescadores y parece que no todos les gustan las capturas que subes o simplemente no tienen porqué darles un like (libertad de opinión y expresión). Pues este simple gesto deriva en muchas desavenencias entre «amigos». Que si no le das me gusta yo a las tuyas tampoco les doy, si no me comentas no me parece bien ya que el otro día yo a ti sí te comenté…

Y qué decir de las fotos de lugares de pesca. ¡Ese puesto es mío y me lo has quitado! ¡Ese pez no es de esa zona y lo has desplazado a otro lugar! Si nos damos cuenta, nosotros mismos estamos generando una serie de desencuentros por una mala praxis.

¿Son nuestras fotos y vídeos un problema serio?

Aquí no generalizo, pero si que es cierto que se busca más el fondo que lo que tenemos delante. ¡Ese árbol de atrás me suena, creo que sé el puesto que es! ¡Ah, ya sé de que embalse o río se trata! ¡Mira este vídeo, para sacar esos peces mejor que no haga nada! ¡Ese montaje no es así, no tiene ni idea! Mil y un comentarios que hacen un flaco favor a la pesca deportiva.

Si que es cierto que duele cuando preparas una zona o puesto para pescar, lo has limpiado y adaptado para ti, lo has sondeado, cebado y has dedicado muchas horas y euros para disfrutarlo. En ocasiones vas y te encuentras allí gente pescando que sin saber nada ha visto un lugar bueno para pescar ¿pero siempre es así? Aquí la decisión es fácil, hay que entender que las orillas son de todos y que aunque duela o moleste encontrarte en esta situación no te queda otra que aguantarse.

Sé que muchos no tendréis esta opinión y que en ocasiones nos van buscando por las redes sociales a ver si localizo donde está sacando esos peces. Esto ya no es jugar limpio y ante esto sí he de decir que el que lo realiza con ánimo de lucro poco pescador es.

Cada vez somos más y queremos lo último: las mejores cañas, la mejor barca sonda, el último macuto o incluso pasar por Cibeles a enseñar nuestros mejores conjuntos… Creo que se está dejando a un lado la esencia de la pesca deportiva. Aquella que se trata de interactuar con el medio, la que permite buscar nuestra paz interna, el sentirse liberado y el aprender a escuchar el silencio sin importarnos en muchas ocasiones que el pez pique o no.

Reflexión y convivencia

Creo que necesitamos reflexionar y aprender unos de los otros, soy de los que opinan que en la humildad está el equilibrio, se puede ser un profesional de la materia, pero esto no será completo sin dar lo mejor de cada uno de nosotros siendo modestos.

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