Una entrevista difundida por el perfil de Instagram @podcastlahoguera ha sacado a la luz un aspecto clave que muchas personas desconocen: cómo actuar correctamente ante la picadura de una garrapata. En el vídeo, la especialista Marisa García Alonso lanza una seria advertencia sobre lo que no debe hacerse y explica el procedimiento correcto para evitar infecciones peligrosas como la enfermedad de Lyme.
Nada de aceite, gasolina ni remedios caseros
Marisa García Alonso, especialista en análisis clínicos y conocida en redes como boticaria integrativa, advierte de un error muy común: aplicar productos como aceite, alcohol o gasolina sobre la garrapata para intentar que se suelte. Según explica, estos métodos no solo son ineficaces, sino que pueden agravar la situación.
«A una garrapata no se le echa aceite, no se le echa gasolina, no se le echa nada, nada de nada», afirma tajante la experta en el vídeo viral. En lugar de eso, recomienda usar una herramienta específica, muy económica y fácil de conseguir, que evita riesgos innecesarios para la salud.
La herramienta que todos deberíamos tener en casa
La forma correcta de quitar una garrapata, según explica García Alonso, es empleando unas pinzas especiales en forma de V. Estas pinzas están diseñadas para retirar el parásito sin apretarlo, algo fundamental para evitar complicaciones. Existen dos tamaños: uno para garrapatas grandes y otro para las más pequeñas.
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«Con estas pinzas tú haces así (muestra como si usara las pinzas) prácticamente sin tocar su cuerpo y haces ‘plas’ y sale sola. O giras y como la garrapata tiene una boca con unos pinchos que está enganchada a la piel, al girarla al hacer así, se desprende, sale sola y sale caminando», detalla.
Manipular una garrapata de forma inadecuada, por ejemplo con los dedos o aplicando productos que la estresen, puede provocar que libere en nuestro cuerpo los patógenos que transporta.
Un simple gesto que puede evitar una enfermedad grave
La advertencia es clara: no saber cómo quitar una garrapata puede cambiarte la vida. Enfermedades como el Lyme, que pueden derivar en dolencias crónicas, se transmiten precisamente cuando estos parásitos vierten sus bacterias o virus en el torrente sanguíneo.
«Como se te ocurra intentar quitarla con los dedos, echarle cosas varias para ver si se asfixia… esa garrapata se va a estresar y va a empezar a vomitar bacterias y virus a tu cuerpo, todas las que tenga», alerta García Alonso.
El vídeo, que ha acumulado miles de visualizaciones, insiste en que este pequeño gesto, aparentemente insignificante, puede marcar la diferencia entre mantener la salud o enfrentarse a un problema crónico.
