La ley animalista del Gobierno de Pedro Sánchez sigue dando de qué hablar en España y no es precisamente poco. Y ahora más aún. El adelanto de las elecciones generales y, por consiguiente, la disolución de la Cortes ha dado lugar a una situación de incertidumbre. Las circunstancias pueden cambiar mucho y empiezan a aparecer las dudas sobre el futuro de este polémico texto.

A pesar de estar aprobada desde hace algunos meses, la Ley de Bienestar Animal no entrará en vigor hasta el próximo 29 de septiembre. Entre medias está la fecha en la que los españoles acudirán a las urnas: el 23 de julio. Entonces, ¿qué va a pasar con las personas que ya han sido sancionadas o con las que lo serán a partir de su entrada en vigor?

Después de que el nuevo presidente se proclame ganador en las elecciones, la posterior constitución de las Cortes y la toma de posesión no se hace de manera inmediata. Si este quiere derogar la ley animalista, habrá que tener en cuenta el tiempo que tarde en formarse el nuevo gobierno y, por lo tanto, se reanude la actividad parlamentaria.

Sabiendo esto, cabe la posibilidad de que ese periodo sin gobierno pueda coincidir con la fecha de entrada en vigor de dicha ley. De este modo, empezará a aplicarse en todos los aspectos.

Esto puede pasar a partir de ahora con la ley animalista

Por su parte, FAUNA, la Federación de Asociaciones Unidas por la Naturaleza y los Animales, ha hecho un análisis en su perfil de Twitter sobre las implicaciones legales que va a tener la disolución de las Cortes.

Según aseguran, en el momento de dicha disolución aún se preparaban los Reales Decretos que aportarían al reglamento de la ley y de núcleos zoológicos de animales de compañía. Asimismo, indican que «esto se frena. No habrá real decreto esta legislatura. No habrá listado positivo, ni de domésticos, ni reglamento de aplicación de la ley, ni desplazamiento a las leyes autonómicas, ni RD de núcleos zoológicos en esta legislatura. Esto está claro. La ley sin reglamento como ley básica no es aplicable en un alto porcentaje».

Del mismo modo, han expuesto que «son aplicables de entrada sus disposiciones. El día 29 estarán prohibidos reptiles de más de 2 kg, etc. Y habrá que informar. Pero si hay cambio de gobierno… ¿A qué organismo? Esto dejaría todo en un limbo legal».

Un cambio de color del nuevo gobierno sería determinante

Además de esto, FAUNA también ha hecho referencia a la influencia que tendría sobre la ley animalista el color del nuevo gobierno. «Si vuelve a gobernar el PSOE la ley no será derogada. Si se tiene que apoyar en sumar ya que podemos no tiene grandes expectativas según las encuestas, puede incluso empeorar. Yolanda Díaz ha confiado las propuestas en protección animal a la extremista Aída Gascón».

En cambio, si el PP fuera quien asumiera el poder, la Federación confiesa que fuentes del partido les hablaron de una posible derogación, pero que Feijóo ha manifestado que tan solo la modificará. Respecto a Vox, FAUNA asume que apostarán por la derogación en cuanto puedan.

Los sancionados por la ley animalista

Otra de las grandes preocupaciones relacionadas con el futuro de la ley animalista es cómo afectará a quienes ya han sido sancionados por ella. En este sentido, el abogado Santiago Ballesteros ya contó al equipo de Jara y Sedal que «la nueva ley derogatoria se aplicará a la resolución de los nuevos casos», excepto que se disponga lo contrario en la derogación.

Por último, hablando de penas y sanciones administrativas de la Ley de Bienestar Animal, estas se tendrán en cuenta cuando la ley favorezca al sancionado. «Aquí sí que hay una retroactividad de la Ley penal», sentencia Ballesteros.