La localidad de Pineda de la Sierra, en Burgos, ha recibido una noticia esperanzadora que asegura la continuidad de su iluminación pública y la preservación de una de sus fuentes de ingresos más importantes: la caza. La Junta de Castilla y León ha anunciado la contratación de más celadores para la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Demanda, una medida que aliviará las preocupaciones económicas de los municipios afectados.

En marzo, la comunidad de Pineda de la Sierra se enfrentó a la posibilidad de perder hasta el 50% de sus ingresos provenientes de la caza debido a la escasez de celadores, quienes son esenciales para garantizar el cumplimiento de la ley de caza. Esta situación habría significado una pérdida estimada de más de 150.000 euros para los 27 municipios que forman parte de la reserva.

El Plan de Caza de la Sierra de la Demanda, limitado por el número de celadores

El ciervo, una de las especies cinegéticas emblemáticas de la zona. © Shutterstock

La Junta había publicado un documento que indicaba que el Plan de Caza 2024-2025 se ajustaría a la disponibilidad del personal de campo existente, que era inferior al 55%. Esto implicaba la eliminación de los permisos de ciervo y becada para la temporada, lo que tendría consecuencias significativas para Pineda de la Sierra y otros varios municipios de la zona donde la caza mayor es una actividad económica crucial.

Inés Camacho, teniente de alcaldesa de Pineda de la Sierra, expresó su preocupación al equipo de Jara y Sedal, señalando que la caza representa uno de los mayores ingresos del municipio. La venta de permisos de ciervos y becadas es fundamental, especialmente durante la berrea, y es con estos ingresos con los que el pueblo financia servicios esenciales como el alumbrado público.

La Junta contratará a tres nuevos celadores

Un celador de medio ambiente en una foto de archivo. © Junta de Castilla y León

Sin embargo, la situación está a punto de cambiar. La Junta de Castilla y León ha comunicado que se formalizará la contratación temporal de tres celadores de medio ambiente para la reserva, lo que permitirá modificar el plan de caza aprobado el 16 de abril y recuperar los permisos de rececho de ciervo y becada.

Estas nuevas contrataciones, sumadas a los movimientos de personal recientes, incrementarán la ocupación de la plantilla de la reserva de caza a casi el 80% de la dotación prevista. Esta noticia ha sido recibida con alivio y optimismo por los municipios, que ven en estas medidas una nueva oportunidad para mantener sus tradiciones y economía locales.

La modificación del plan de caza se presentará en la próxima junta consultiva extraordinaria, que se espera se celebre a finales de este mes o principios del próximo.