Extremadura ya ha confirmado la presencia de, al menos, cuatro ejemplares de lobo ibérico en los últimos meses, por lo que el regreso de esta especie a la comunidad autónoma ya es una realidad después de varias décadas sin tener noticias de esta especie en la región.

Según adelanta la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad al diario Hoy, la primera confirmación de su regreso llegó a inicios del año pasado, cuando se verificó que la muestra fresca de excrementos que se habían recogido meses antes en el término municipal de Villanueva de la Vera correspondía a una hembra de lobo. Y cerca de allí, en el término de Madrigal de la Vera, se detectó el paso de otro ejemplar, esta vez un macho.

Técnicos de la Dirección General de Sostenibilidad recogieron muestras de los lobos en el marco de la elaboración del censo estatal coordinado de lobo ibérico de los años 2021 y 2022 y fueron posteriormente validadas mediante verificación genética por el equipo de investigación de la Universidad de Oporto e Instituto de Investigación Científica de Excelencia Internacional Cibio/Biópolis.

Más datos de la presencia de lobos en Cáceres

Por otro lado, también se tiene constancia de la presencia de lobo en una zona fronteriza con Portugal, próxima al término municipal de Zarza la Mayor, entre el norte del Tajo Internacional y el sur de la Serra de Malcata. Se trata de dos muestras que ha identificado genéticamente el Instituto portugués da Conservaláo da Natureza e das Florestas.

Como ya exponíamos hace un año en este medio, se podría tratar de un individuo o individuos procedentes de Castilla y León, probablemente de una presencia compartida con esta región o que haya derivado de la misma en un ejemplo habitual de lobos que deambulan por esta zona limítrofe con las provincias de Salamanca y Ávila. También hay que tener en cuenta que en Extremadura no existe por el momento un plan de recuperación de la especie.