Galicia, Cantabria o País Vasco compran pis de lobo a una empresa de Canadá para derramarlo por sus carreteras con la idea de que espanten a corzos y jabalíes y así evitar accidentes de tráfico.
24/2/2017 | Redacción JyS
Al año se producen en España 14.000 accidentes de tráfico con animales y casi 600 personas resultan heridas. Siniestros como el que publicamos a primeros de mes donde una manada de jabalíes cruza la calzada a plena luz del día son cada vez más frecuentes, y la cifra no para de aumentar. Ante este fenómeno, algunas administraciones reacias a fomentar la caza de las pujantes poblaciones de cochinos o corzos (los que más siniestros provocan), han optado por otras soluciones que no impliquen la muerte de estos animales.
Una de ellas, puesta en marcha por varias administraciones, es derramar orín de lobo junto a las carreteras con el objetivo de que jabalíes y corzos, al olerlo, se espanten y no crucen la calzada. Esta técnica desata muchas dudas, ante la imposibilidad de cubrir los millones de kilómetros de carretera de nuestro país constantemente, sin que el resto de especies silvestres se acostumbren a él, si es que realmente sirve para disuadirlos.
El orín que están adquiriendo algunas comunidades autónomas de España procede de Canadá, donde se embotella y cierra al vacío para conservar toda su esencia. La empresa distribuidora no menciona dónde se sitúa el criadero de lobos que sirve orina embotellada a diputaciones vascas y gobiernos como el de Galicia o Cantabria, pero afirma que es 100% natural. Tampoco se conoce cómo han capturado o criado los lobos, aunque garantizan que no hay maltrato de ningún tipo. Y aseguran que una garrafa de 10 litros ‘cunde’, y es posible proteger varias carreteras. Cantabria ha sido una de las primeras en instalar 3.000 botellas con pis de lobo, a la espera de reducir en un 75% los accidentes de tráfico con fauna silvestre.
Pis de lobo a 36 euros el litro
Al menos de momento, lo cierto es que jabalíes y corzos siguen provocando cientos de accidentes. En Galicia, sin ir más lejos, Técnicos de la Consellería de Infraestruturas están probando este tipo de orinas. Pero por el momento no es suficiente. El problema es grave. Sólo en la red de carreteras dependientes de la Xunta, las más afectadas por el jabalí en Galicia, se han contabilizado 5.800 accidentes en los últimos diez años.
Por el momento, a la espera de resultados definitivos, lo cierto es que la manera más natural y económica –pues no cuesta dinero al erario público sino que, al contrario, genera ingresos– es la caza. No hay que olvidar que cada litro de este producto cuesta a los contribuyentes unos 36 euros.