En un operativo reciente, la Guardia Civil de Almería ha investigado a cuatro furtivos y un menor que pillaron abatiendo liebres con galgos en época de veda en el paraje de La Escribanas, en Tabernas. Los individuos, que carecían de licencia de caza y autorización del propietario del coto privado, han sido propuestos para sanción por delitos contra la flora y la fauna.

La intervención se produjo tras una queja ciudadana que alertó a la Guardia Civil del Puesto de Tabernas, quienes incrementaron la vigilancia en la zona. Durante una de estas inspecciones, los agentes identificaron a los sospechosos, quienes iban acompañados de cinco perros. La vestimenta de los implicados presentaba manchas de sangre y los galgos tenían heridas en las patas y manchas en los hocicos, signos evidentes de haber abatido algún animal en las últimas horas.

Los agentes localizaron dos liebres muertas en el vehículo de los sospechosos

Dos agentes de la Guardia Civil junto a dos presuntos furtivos en una foto de archivo. © Guardia Civil

En el vehículo de los implicados, los agentes encontraron dos liebres muertas, cubiertas de sangre y con heridas producidas, probablemente, por la mordedura de los canes.

La caza de la liebre está prohibida en estas fechas según la orden de vedas de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía para la temporada 2023/2024. Las piezas cobradas fueron confiscadas y entregadas a una organización benéfica.

La Guardia Civil ha recordado por último las consecuencias legales de tales actos, citando el artículo 335 del Código Penal. Este establece que la práctica del furtivismo puede acarrear multas significativas así como inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de caza.

Este suceso pone de manifiesto la importancia de la colaboración ciudadana en la detección y prevención de actividades ilegales que amenazan la conservación de las especies y los ecosistemas.

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