El afortunado ya había podido verlo en otras ocasiones, pero nunca había logrado engañarlo. Esta vez, junto a un grupo de amigos, viajó hasta el mismo lago y consiguió hacerse con este espectacular ejemplar utilizando una cucharilla.
19/7/2016 | Redacción JyS
Un estadounidense llamado Perry Peterson ha conseguido atraer hasta su señuelo a un lucio albino de casi 105 centímetros. La captura se produjo en el Lago de los Bosques (Canadá). Sin embargo, no es la primera vez que se tiene constancia de su existencia. El mismo pescador que ahora ha ganado la lucha, ya había intentado en múltiples ocasiones sacarlo del agua, aunque sin éxito.
Peterson lo tenía localizado. Lo había visto en cuatro ocasiones diferentes durante los últimos dos años e incluso había conseguido que persiguiese su señuelo. Por eso, aprovechó sus últimas vacaciones para desplazarse desde Arizona e intentar pescarlo.
“Era fácil verlo”, asegura Peterson en una entrevista. “Era casi como si brillase en la oscuridad. Parecía un tronco de abedul”. Nunca le habían creído y siempre le había resultado complicado fotografiarlo mientras seguía su anzuelo. El animal siempre desaparecía cuando ya había logrado prepararse para tomar la instantánea.
El lucio albino pica la cucharilla
“Ya nos resignábamos –el grupo de amigos- a verlo y a pensar que nunca lo capturaríamos, pero esperábamos tener al menos una foto”, relata Peterson a lakeofthewoodsmn.com. “Unos días más tarde, mientras lanzábamos en el mismo área, probamos con cucharillas y con pez artificial para ver si conseguíamos alguna buena picada de lucio. Fue entonces cuando picó y empezó a tirar del sedal, casi me acaba el carrete. Hasta que no lo acerqué al bote no me di cuenta de que era él”, continúa.
Entonces todo el grupo empezó a gritar como si hubieran entrado en pánico. Si sacar un lucio normal te produce una sensación increíble, imagina pescar un ejemplar de estas características. “He cogido lucios de hasta metro y medio, pero nunca había sentido la misma sensación que al sacar a este”, narra el pescador. “Espero encontrármelo más veces en algún futuro viaje, o que alguien suba fotos a las redes por haberlo sacado otra vez”, finaliza.
