Por Enrique Aguado (www.cosaschulasdepesca.com)
Al margen de la controversia de si se debe o no vender un pez que está en grave riesgo de desaparecer en los ríos españoles, lo cierto es que el Campanu ha sobrevivido incluso a la prohibición de comercializar con esta especie, norma que entró en vigor en el año 2002 después de que las autoridades decidiesen poner freno a un mercadeo insostenible. Desde ese año, el único salmón que se puede vender es el campanu de cada río, y siempre en acto público.
Un poco de historia del salmón en Asturias
Los derechos de pesca del salmón siempre fueron objeto de deseo y de lucha de unos cuantos escogidos. Ya en el año 775 aparecía ligada a los derechos de la monarquía asturiana, que posteriormente se convertirían en los llamados ‘privilegios de pesca’ que durante siglos pasaron a pertenecer al clero, la nobleza o incluso a determinados monasterios según el río donde se ubicaban. Fue a comienzos del siglo XIX cuando se suprimen estos privilegios y el Estado pasa a gestionar el bien de su pesca.
El carácter deportivo de su la captura del salmón no llega hasta los primeros años del siglo XX con la II República, que autorizó las primeras sociedades de caza y pesca y establece los cotos reglamentados, en los que además se prohíbe ya cualquier tipo de arte que no sea la caña y que, finalmente, se regulará con la Ley de Pesca Fluvial de 1942, aún vigente. Un año más tarde comienzan a precintarse los salmones, un método esencial para conocer el número de peces que remontan los ríos, su tamaño y longitud.
Hay que remontarse varios siglos atrás, sin fecha concreta, para saber cuándo se acuñó el término ‘Campanu’. En tiempos de hambre y muy probablemente durante la Edad Media, el repicar de las campanas de cada iglesia anunciaba el avistamiento de los primeros salmones que remontaban cada año, avisando así a la población para que tuviese la oportunidad de hacer acopio de una importante fuente de alimento. De esas campanas deriva la palabra «campanu», que pronto se asoció a un concepto de esperanza y de alegría, un acto de agradecimiento a la naturaleza por mantener el ciclo de la vida.
Éste no es acontecimiento exclusivo de España, sino que se celebra en todos los rincones del mundo donde hay salmones. En Noruega lo denominan premiärlaxen (primer salmón), y en Estados Unidos the supernatural one (el primer superviviente) como un modo de nombrar una tradición nativa que considera a los salmones reencarnaciones humanas en el océano y que remontan los ríos para alimentar a los suyos. En otras zonas como Irlanda o Escocia es frecuente ver referencias al salmón y las campanas en pubs, tiendas o los monumentos locales.
La subasta del Campanu
Durante muchos años, el primer salmón del año se subastaba en establecimientos ribereños como Casa Grana o el casino de Cornellana, donde acudía un gran número de curiosos y pujadores para hacerse con el campanu. A raíz de la prohibición de su venta, se decidió que este acto tuviese un carácter festivo y quedó enmarcado en las actividades de la Feria del Salmón que se celebra en el monasterio de San Salvador Cornellana, donde la subasta está perfectamente reglamentada y los ofertantes tienen que acreditarse previamente para hacer valer su condición durante el acto. En las últimas temporadas los campanus asturianos han sido pescados y comprados de esta manera:
- Campanu año 2005: Juan Manuel Mori. Salmón de 4,8 kg pescado en el coto La Pena (río Eo). Comprado por el restaurante Casa Parrondo (Madrid) por 13.200 euros.
- Campanu año 2006. Paulino Fervienza. Salmón de 3,7 kg pescado en el coto A Volta (río Eo). Comprado por el restaurante Casa Tista (Ribadesella, Asturias) por 12.000 euros.
- Campanu año 2007. Luis Miguel García. Salmón de 4,4 kg pescado en el coto la Bouza (río Narcea). Comprado por el restaurante As de Picas, del Casino de Gijón, por 18.000 euros.
- Campanu año 2008. Isaías Rebordinos. Salmón de 4,9 kg pescado en la zona libre del Puente Quinzanas (río Narcea). Comprado por el restaurante La Chalana (Aviles, Asturias) por 14.500 euros.
- Campanu año 2009. Gonzalo Álvarez. Salmón de 10 kg pescado en el coto de Puente Quinzanas (río Narcea). Comprado por el restaurante Bocamar (Oviedo, Asturias) por 8.500 euros.
- Campanu año 2010. Bernardo Velázquez. Salmón de 6,2 kg pescado en el pozo Fabeiro, del río Narcea. Comprado por el restaurante Casa Parrondo por 10.000 euros
- Campanu año 2011. Declarado nulo al demostrarse que el pescador pescó el salmón en el río Esva y no en el Narcea como había asegurado.
- Campanu año 2012. Enrique García. Salmón de 6,7 kg pescado en el pozo Los Kiwis del río Narcea. Comprado por la carnicería Delfina de Avilés por 6.000 euros.
- Campanu año 2013. Pescado por Federico Vega Díaz. Salmón de 8,850 kg capturado en la zona de La Masona, río Sella. Adquirido por el restaurante El Campanu por 6.700 euros.
- Campanu año 2014. Pescado por Íñigo Justo Fernández con un peso de 4,5 kg en el coto de El Tilo del río Cares. Fue comprado por José María Mori Cuesta, El Marqués por 5.500 euros.
- Campanu año 2015. Pescado por el bilbaíno Jorge Moreno en el coto de Llaos, río Sella con un peso de 5,8 kg. Fue adquirido por José María Mori Cuesta, El Marqués por 5.500 euros.
- Campanu año 2016. El campanu más barato de los últimos años (3.700 euros) fue pescado en la zona conocida como La Vola, del río Eo, por Guillermo Maraño. El pez pesó 4,1 kg.
- Campanu año 2017. Pescado por un veterano de Trelles (Coaña) de 63 años de edad, en el Louredal, en el río Eo a las ocho menos diez de la mañana. El restaurante gijonés As de Picas se llevó el ejemplar por 9.500 euros.
- Campanu año 2018. El campanu 2018, de siete kilos, se vendió por casi 12.000 euros en el río Sella en Cangas de Onís, y pesó 7,1 kilos. Lo pescó Juan Antonio González.
- Campanu año 2019. Le salió al ovetense Fernando López Castro en en el pozo la Pría del coto El Tilo del río Cares a los pocos minutos de abrirse la temporada y se subastó por 10.000 euros.
- Campanu año 2020. Pesó 5,3 kilogramos y midió 76 centímetros. Fue pescado en el coto parcial de los Espigones de Triongu. Lo subastaron al Bosque de Javita por 10.000 euros en total.
- Campanu año 2021. Gonzalo Suárez lo echó a tierra en el coto de La Volta y pesó algo más de cinco kilos. Lo subastó al Bosque de Javita por 10.300 euros en total.