En una reunión reciente del Consejo de Caza de Mallorca, se han aprobado cambios significativos en la orden de vedas, alineándose con las directrices europeas para la gestión de la fauna silvestre. La nueva regulación, introduce ajustes de cara a la nueva temporada de caza y en cuanto a las especies permitidas.
Nuevas fechas
La caza de liebres con escopeta se permitirá exclusivamente durante dos días específicos: el 18 y el 25 de agosto. Cada cazador podrá capturar un máximo de una liebre por día.
La moratoria de caza de la tórtola europea se extiende por otra temporada, reafirmando el compromiso de Mallorca con la protección de las aves migratorias. Además, la tórtola turca queda excluida de la caza este año, ya que no se considera especie cinegética en España.
Por su parte la temporada de caza de la paloma bravía comenzará el 1 de septiembre.
La temporada de caza para especies como el zorzal común, el zorzal alirrojo, el estornino pinto, la becada, la paloma bravía y la paloma torcaz, en sus respectivas modalidades, se extenderá hasta el 9 de febrero.
Las modalidades tradicionales de caza de perdiz con reclamo y de zorzal a coll concluirán el 10 de febrero.
Unanimidad y gran participación
La resolución anual fue aprobada por unanimidad en la votación final, destacando la colaboración entre los miembros del sector cinegético, ambiental y rural. La reunión, que tuvo lugar en la finca de Raixa, también contó con la participación de entidades agrarias como ASAJA y Mallorca Rural, quienes mostraron gran implicación y agradecimiento por ser incluidos en el proceso de toma de decisiones.
Pedro Bestard, vicepresidente segundo y consejero de Medio Ambiente, Medio Rural y Deportes, presidió la sesión y enfatizó la importancia de la contribución de las asociaciones agrarias al mundo cinegético. Resaltó la interrelación entre la agricultura y la caza, y cómo las directrices europeas han servido tanto para restringir como para permitir la caza de ciertas especies, basándose en los periodos de migración.
Sebastià Perelló, director insular de Caza, subrayó el esfuerzo realizado para alcanzar un consenso entre todos los sectores implicados, siempre ajustándose a los datos técnicos y científicos disponibles.
Emergencia Cinegética
Durante la reunión, se consideró la posibilidad de declarar una emergencia cinegética para las palomas, debido al aumento de su población y los problemas asociados, como daños agrícolas y riesgos para la salud pública. Esta medida refleja la preocupación expresada por la Federación de Entidades Locales de las Islas Baleares (FELIB) y los alcaldes de la región.
Las nuevas regulaciones de caza en Mallorca representan un paso adelante en la armonización de las prácticas cinegéticas con la conservación ambiental y las políticas europeas.