La joven cazadora Fátima Martín, de 23 años de edad, abatió junto a su novio Álvaro Moyano, de 22 años, el primer venado de su vida el pasado sábado 28 de enero en una montería en abierto celebrada en las cercanías del municipio ciudadrealeño de Ruidera, donde se encuentra el parque natural de las célebres Lagunas del mismo nombre. Además, el animal tenía un imponente volumen y hasta 15 puntas.

Ha sido su novio, Álvaro Moyano -natural junto a ella de la localidad de Alcalá la Real (Jaén)- el que ha narrado a la redacción de Jara y Sedal cómo se desarrolló la exitosa jornada: «Estábamos en el puesto, tranquilos, y hablando de que se escuchaban muchos disparos y que la montería se estaba dando muy bien. No sabíamos si nos pasaría o no algo… cuando, de repente, escuchamos un tropel bajando», comienza exponiendo el joven a este medio.

«Le dije a mi novia que se preparase, porque podía entrar aquí, pero se fue para el puesto de al lado; el cazador que había en él disparó en dos ocasiones, pero lo falló. El ciervo venía reventando todos los matorrales que tenía a su paso, y Fátima lo apuntó y le disparó hasta en tres ocasiones», recuerda. «Creíamos que no iba a caer, pero lo hizo», señala aún emocionado por ser la primera montería de la vida de Fátima.

«Nos pusimos muy contentos, a abrazarnos, a saltar…»

Algunos de los cazadores presentes junto al gran animal. © F. M.

«Siempre se dice que es la suerte del principiante, y tras disparar parecía que no le habíamos dado, porque estaba muy entero, y por ello se desanimó un poco, pero luego fuimos a ver si había sangre y hallamos unas gotas, por lo que nos pusimos muy contentos, a abrazarnos, a saltar…», recuerda.

Cuando Álvaro vio el animal lo primero que pensó es que es iba a arrollar. «Menos mal que me vio a mí y se fue al lado izquierdo, y mi novia pudo disparar…», añade.

Durante el lance, la joven utilizó un rifle Benelli Argo en calibre .300 Winchester Magnum y bala Federal de 180 grains.