Son padre e hijo y juntos abatieron un cochinazo de 105 kilos con unos descomunales colmillos en una montería a la que fueron invitados por los miembros de un coto social toledano.
Redacción JyS
Francisco Javier y Jorge Espinosa, padre e hijo, nunca olvidarán aquella cacería a la que fueron invitados y en la que abatieron un cochinazo de 105 kilos y enormes colmillos. Fue el pasado 15 de febrero en una montería de 50 euros y 30 puestos que se celebraba en el coto social de Aldeanueva de Barbarroya, en la provincia de Toledo.
Jorge Espinosa relata el lance que vivió en el puesto junto a su padre, que fue quien abatió al macareno: «La montería comenzó realmente temprano, a las 07:00 horas. Al parecer, según nos dijeron los cazadores del lugar, los jabalíes se salían muy rápido de la mancha».
Un jabalí muy madrugador
Diez minutos de colocarse les entró el enorme cochino. «Yo fui el primero que lo vio entrar por la derecha. Rápidamente avisé a mi padre y le disparó. El cochinazo quedó herido y se metió directamente a un zarzal, pero sabíamos que de allí no saldría», nos cuenta el joven.
Una hora después del toque de caracola la niebla obligó a detener la montería. Habría que esperar a que se levantasen las nubes. Pudieron volver a su puesto, pero ya no hubo suerte. «Aprovechamos la tarde para ir a por el jabalí, al que encontramos en la zarza», nos cuenta el pequeño de los Espinosa. «Fue la atracción de la junta de carnes. Era un cochinazo de 105 kilos y unas navajas impresionantes».
Paga 15 euros por un puesto y caza este jabalí de 110 kilos
El joven cazador aragonés Cristian Roc Andreu, natural de la localidad zaragozana de Nonaspe, no olvidará la batida a la que acudió el pasado 14 de febrero. Le costó tan sólo 15 euros un viejo jabalí de 110 kilos con unas descomunales navajas que han dado 108 puntos. Te lo contamos aquí.