La primavera es señal de vida. El campo se engalana con sus mejores verdes y todo parece despertar de un letargo provocado por el frío del invierno. Los animales no son ajenos a este despertar y aprovechan las bondades del clima de mayo para traer al mundo a los ejemplares del futuro. Y por supuesto, nuestra emblemática perdiz roja no iba a ser menos.

Es en estos días cuando, si la gestión por parte de los cazadores ha sido la adecuada, podemos ver por caminos y veredas los frutos de tanto sacrificio en forma de polladas de perdiz. Y es que no hay mayor recompensa para una persona que se desvive por y par el campo y sus moradores que descubrir a una hembra de perdiz seguida de su prole.

18 pollos detrás de la hembra

Un ejemplo de todo esto es el siguiente vídeo, compartido por la Federación Andaluza de Caza desde su perfil de Instagram. El clip, grabado en un coto social de la provincia de Málaga y en el que se observa a una hembra de perdiz seguida por 18 pollos, es una prueba evidente de que la vida se abre paso.

«Este vídeo, en una sociedad de caza malagueña, no sólo evidencia el buen trabajo de gestión y conservación de los cazadores, sino también la importancia de mantener cubiertas vegetales en caminos, cunetas… estas zonas son clave para que los perdigones encuentren refugio y alimento», asegura la FAC en el texto que acompaña a la publicación.

¿Cuántos huevos pone una perdiz?

Después de ver un vídeo como el anterior en el que una sola perdiz está sacando adelante a 18 pollos, la pregunta es lógica. ¿Cuántos huevos pone una perdiz? Pues bien, como todos sabemos la perdiz anida en el suelo. El macho prepara varios nidos en lugares con buena cobertura y la hembra elige uno de ellos donde pone de 9 a 18 huevos que incuba durante 23 días, según publica Francisco Hernández-Briz Vilanova, ingeniero técnico agrícola, en un sus Hojas Divulgadoras sobre la perdiz roja.

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Una perdiz roja se enfrenta a un cernícalo para defender a sus pollos


Además, Hernández-Briz añade que «lo más frecuente es que mientras la hembra incuba la puesta, el perdigacho vigile en un lugar elevado para expulsar a los machos intrusos y avise a su compañera de los posibles peligros, sobre todo de los depredadores. Si por circunstancias meteorológicas adversas, o debido a los múltiples depredadores que consumen los huevos de perdiz se pierde la primera puesta, la hembra suele efectuar una segunda puesta de reposición más reducida que la primera. En algunas ocasiones la perdiz efectúa una puesta doble en cuyo caso ambos adultos incuban cada uno un nido».

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