El cazador le había seguido la pista a este corzo desde hacía días, pero no se imaginaba que escondería ese tesoro en su interior. Cazador y taxidermista relatan su experiencia.
1/6/2019 | Redacción JyS 

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El corzo, antes y después de cocer su trofeo. / J.M.

Un cazador consiguió cazar el pasado fin de semana en una finca de Castilla-La Mancha, un corzo con dos colmillos juntos en el mismo lado. J.M., ha narrado para Jara y Sedal cómo se hizo con la extraña pieza, que ya está dando la vuelta a las redes sociales.
Tal y como ha asegurado, la captura la obtuvo en una finca con zonas de charcas y un río en medio de un valle. «Había visto el corzo en esa zona hacía unos días», por lo que siguió su pista sin saber aún que tenía esa particularidad guardada. Tan sólo cuando lo llevó a la taxidermia de Jesús Pérez, situada en la localidad cacereña de Torrejoncillo, se dio cuenta de la extraña particularidad del cérvido.
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Más imágenes del paso del corzo por el taxidermista. / J.M.

La captura, conseguida el pasado fin de semana, llegó «muy de amanecer», cuando el cazador vio unas hembras en la parte más baja del valle. Siguió su pista y, efectivamente, el macho estaba cerca. A unos 220 metros aproximadamente localizó al animal con los prismáticos y, en un instante en el que se paró para rascarse la cuerna en una mata, J.M. apoyó su rifle en el trípode y llevó a cabo el disparo. Con una sola bala consiguió cazar al corzo.
El cazador cuenta que «la hembra ni se asustó del disparo» y cuando llegó hasta el macho «aún estaba allí, a cinco metros de él». Por su parte, el taxidermista, de 24 años de edad, ha relatado a Jara y Sedal que en los cinco años que lleva dedicado a esta profesión no se había topado con un caso similar. «Tan sólo he hecho un corzo que tenía colmillos, pero en los dos lados», afirma.

Otro corzo con unos afilados colmillos en la misma semana

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Manuel Chabrera, con el corzo antes y después de cocer su trofeo. / M.C.

Hace unos días fue protagonista en Jara y Sedal cómo Manuel Chabrera, un cazador de la localidad castellonense de Villarreal, aprovechó parte de sus vacaciones para ir con su esposa a la serranía de Cuenca el pasado fin de semana donde coseguiría hacerse con un corzo con unos afilados colmillos.
Después de abatirlo, al cazador no le pareció «un corzo espectacular», porque «era muy pequeño de cuerpo, aunque viejo». La sorpresa fue que cuando llegó a casa y le abrió la boca para ver la dentadura, comprobó no solo lo adulto que era, sino que «llevaba colmillos».

Otra corza con colmillos en enero

El conocido tirador de Bergara Rafa Carrillo, campeón de España de F-Class 600 yardas, cazaba el pasado mes de enero una corza a una distancia de 780 metros. El lance lo grabó en vídeo y este cuando los protagonistas se acercan al animal enseñan a cámara un hecho inusual: la hembra a la que acababan de disparar tenía unos particulares colmillos muy desgastados debido a su avanzada edad.

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