Hasta el pasado 14 de octubre tenía lugar en Budapestel el gran evento One With Nature, dedicado a la caza. Los organizadores han recibido cerca de un millón de visitantes de un centenar de países, una cifra que sin duda ha sido más fácil de alcanzar gracias a la gran ‘estrella’ de la muestra, una escultura gigante de la cabeza de un ciervo berreando creada con miles de cuernas.

El artista que la ha creado ha colocado en la base las cuernas y desmogues más grandes e incluso ha usado algunas palas de gamo, entrelazando unas y otras para conformar unos buenos cimientos. Tras ello, ha posicionado las cuernas de menor tamaño para construir el centro y la parte alta de la estructura. Pero, ¿quién es el autor de la obra?

Se trata de Gábor Miklós Szőke. Él mismo, durante la inauguración de la feria, dijo que la estatua estaba hecha con unas diez toneladas de cuernas y que tiene la forma de un ciervo en celo, por cuya boca los visitantes podían entrar a la Exposición Mundial. Fueron las fincas forestales estatales húngaras las que reunieron la mitad de las cuernas necesarias; el resto de ellas procedían de casi todas las sociedades de caza del país. Además, este no es el lugar final de la estatua, sino que será transportada a la ciudad de Keszthely, donde se erigirá en el jardín del Museo Festetics.

Este artista nació en 1984 en Budapest y se graduó de la Universidad de Bellas Artes de Hungría en 2010. El escultor es conocido por sus monumentales obras públicas sobre la mitología, inspiradas sobre todo en Dante. Sus escenas más famosas incluyen el halcón de veinte metros de largo construido frente a la nueva arena del equipo de fútbol americano Atlanta Falcons, el águila Fradi construido frente al estadio del equipo de fútbol Ferencváros y estatuas de animales desde Szeged hasta Moscú. 

En declaraciones al medio nacional Mandiner, el autor de la obra indica: «Hace apenas unos meses, se publicó una foto en la red de que las astas habían llegado a mi taller en Csepel». Sin que nadie supiera de qué se trataba, los internautas polemizaron sobre la ‘matanza’ de miles de ciervos. Muchos portales de Internet engañaron a la gente, «recibimos muchos comentarios donde me amenazaban porque pensaban que yo había matado todos los animales, aunque, como dijimos antes, estas cuernas fueron recolectadas por silvicultores y asociaciones de caza procedentes de desmogues de ciervos, en su mayoría. Muchos conservacionistas atacaron sin conocer los hechos básicos», se lamenta el autor.

No obstante, «las personas que han seguido y reconocido mi trabajo desde que me gradué ahora lo consideran ineludible. Hubo un portal de noticias que me elogió cuando hice el halcón para el equipo de los Atlanta Falcons, que se convirtió en la principal atracción de Georgia, ahora llamado escultor de NER», expone.

En la sociedad actual, según sigue defendiendo Gábor Miklós Szőke, «muchas personas se han alejado tanto de la naturaleza que ya no pueden digerir el concepto de caza, por eso creo que es muy importante presentar la esencia y cultura del mundo cinegético. Sin caza, no hay gestión del medio, solo control incontrolado. La caza evita que la vida silvestre se extinga, aunque parezca increíble. La caza tiene la misma edad que el arte. Nuestros monumentos de arte más antiguos también representan una escena de caza».

Sobre el sentido de la obra, por último, explica que vio «a muchos silvicultores que mostraron con orgullo a sus amigos y familiares lo que había detrás de esta cornamenta. Las personas necesitan poder aferrarse a algo que les pueda dar fuerza e identidad, y el ciervo maravilla es el tótem común de los húngaros», concluye.

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