El diario El País ha publicado dos reportajes sobre el abandono de galgos plagados de datos incorrectos que han generado una ola de odio contra los ciudadanos cazadores.
15/5/2019 | Redacción JyS
El diario El País ha vuelto a encender la llama del odio animalista hacia los cazadores este pasado martes después de publicar dos reportajes sobre galgos. En el primero de ellos, titulado ‘El negro misterio de los galgos abandonados’ el diario trata de poner cifra a los datos reales de abandono de esta raza formulando la siguiente pregunta: «¿52 o 50.000 animales desechados al año?». Para dar respuesta a la pregunta recurre a fuentes oficiales, como el SEPRONA, y a otras animalistas –y carentes de rigor– como la Plataforma No a la Caza (NAC), la C.R.E.L (Federación por la defensa y la protección de los Galgos) o la asociación alemana Galgo Voice Frankfurt.
Pero no son las únicas fuentes no oficiales y carentes de rigor consultadas por El País para este reportaje. También incluye otros testimonios como los de la Fundación Benjamín Menhert –en Andalucía–, Animal Rescue España y SOS RESCUE –en Castilla-La Mancha–. Por último, en un pequeño ladillo, se hacen eco de las declaraciones de la Federación Española de Galgos, que desmiente que las cifras aportadas por los colectivos animalistas sean reales. Como conclusión, el artículo es incapaz de sostener la veracidad de la manida cifra de los 50.000 galgos abandonados que esgrimen los animalistas, pero asegura –también sin argumentos– que «España avergüenza por su maltrato a los canes usados para la caza».
El reportaje «Desechos de la caza»
En el segundo de los reportajes, titulado ‘Desechos de la caza’, El País entrevista a diversos responsables de protectoras que muestran su visión sobre el supuesto abandono de galgos. El texto está plagado de información incorrecta y falsa desde el principio, ya que asegura: «El galgo, por su condición física y su velocidad, es la raza más empleada en la modalidad de caza menor». El galgo no es la raza más empleada para la caza menor. De hecho, su participación en la actividad cinegética se reduce a una sola modalidad que no es, ni de lejos, la más practicada –la caza de la liebre–.
El artículo se hace eco de los mantras de los anticaza asegurando que «en España ‘sobran’ anualmente unos 50.000 galgos», a pesar de que, como el mismo diario reconoce, «el Seprona únicamente registró el abandono de 52 de estos perros en 2018». El País también publica sin rubor otra de las grandes falacias de los prohibicionistas: «España es el único país de la UE donde sigue siendo legal la caza con galgo». Ningún país europeo prohíbe que esta raza pueda participar en la caza.
El odio a los cazadores se desata
A pesar de la carencia de rigor, los datos erróneos, las cifras del SEPRONA y la supuesta realidad del abandono de los 50.000 galgos –que el periodista de El País tampoco pudo contrastar– los artículos publicados fueron compartidos en redes sociales, donde viralizaron y los mensajes de odio hacia los ciudadanos que ejercen su derecho a cazar no tardaron en aparecer. «Personas despiadadas, inhumanas! Pero así no más les irá a ir en el resto de sus vidas!», «Cazadores=Asesinos. Mire como se mire», «Gentuza los cazadores y los galgueros. Tenían que sufrir igual que hacen ellos con los perros» o «Qué crueldad más gratuita. Pero siendo cazadores…» son sólo algunos de los cientos mensajes que no han sido moderados y aún se pueden leer en las redes del diario.
Por su parte, en Twitter seguía aumentando el odio contra los cazadores:
https://twitter.com/jos_guira/status/1128256923495731201
Sin embargo, había usuarios que llamaban a la cordura, como estos:
1/2 Los galgos federados, se les pone el chip y se les tatúa la oreja con un número identificativo donde pone la fecha de nacimiento, el número de perros que han nacido en la camada y el orden en el que nace, se les toma muestra de ADN y todo para evitar robos.
— Mark Lenders (@KojiroHyuga09) May 14, 2019
¿Es El País un diario contrario a la caza?
¿Es El País un diario contrario a la caza? Para dar respuesta a esta pregunta, el pasado mes de diciembre Jara y Sedal buceó en la hemeroteca de este diario, buscando aquellas noticias relacionadas con la caza en los últimos añis. En la gran mayoría de ellas la caza aparece como algo negativo o delictivo, puesto que lo etiqueta con el concepto ‘caza furtiva’. Y en la mayor parte de los casos aparece vinculada a sucesos polémicos.
Otros ataques a la caza con galgo desde la prensa europea
Los mensajes que dibujan una España llena de galgos ahorcados y apaleados por sus atrasados habitantes rurales también traspasa nuestras fronteras. Especialmente en aquellos países como Francia, Alemania o Inglaterra donde las asociaciones animalistas envían en adopción –a cambio de sustanciosas cantidades de dinero– a su raza estrella: el galgo.
Desde Irlanda, por poner un claro ejemplo, se han extendido los ataques del lobby para la difusión de una mentira que cala en gran parte de la sociedad. Los animalistas de Francia tampoco se quedan atrás e inundan la prensa por un problema que realmente no existe. También desde el país galo atacan a los galgueros españoles en las redes sociales basándose en los mismos mensajes inventados, como la de que en nuestro país al terminar la temporada de caza suelen matarse a los perros del modo «tocar el piano», que según relatan se trata de dejar al animal colgado de un árbol pero con la punta de las patas traseras sobre el suelo para que la muerte sea mas agónica.
Desde Alemania también han atacado la imagen de la caza con galgo en España y se han hecho eco de la mentira animalista de los 50.000 galgos abandonados.
