Desde la Región de Murcia han dado una muy buena noticia para los amantes de la caza y la pesca. Como forma de luchar y erradicar el furtivismo, la Comunidad ha intensificado la vigilancia y el control sobre estas actividades. Para ello, han anunciado que harán uso de drones de altas capacidades con cámara térmica incorporada.
La medida ha sido presentada este mismo viernes, 31 de enero, por el consejero Juan María Vázquez. Dicho sistema, al que muchos ya lo llama como «el ojo de Dios», servirá para dotar a los agentes medioambientales y que, así, puedan «intensificar su capacidad de vigilancia, control e inspección».
Ya el año pasado, estas unidades llevaron a cabo medio centenar de servicios para el seguimiento de fauna y control de actividades ilícitas haciendo uso de estos silenciosos y ligeros aparatos. Están dotados de un sistema GPS de alta precisión, sensores de vuelo nocturno y cámaras térmicas que hacen posible detectar a personas y animales incluso en la oscuridad.
Drones para luchar contra el furtivismo
En palabras del consejero, se trata de «una herramienta estratégica para la monitorización remota de zonas de difícil acceso y el control de áreas naturales». «Ya la hemos utilizado para seguimiento de masas forestales afectadas por la sequía, así como para la realización de censos y seguimiento de fauna, además de en la lucha contra el furtivismo», ha concretado.
De igual modo, los equipos de geolocalización también han sido reforzados con la adquisición de receptores de mano que ayudan a mejorar la precisión en las tareas de inspección y seguimiento en campo.
Junto con los drones, otra novedad de este año han sido las cámaras trampa y visores térmicos de última generación, los cuales se han sumado a los prismáticos, telescopios y sistemas de geolocalización para monitorizar las zonas de alto riesgo, además de vehículos todoterreno para operaciones en superficies complejas.
Un precedente en Castilla y León
Hace ya poco más de dos años, en este mismo medio también nos hicimos eco de una noticia parecida, aunque aquella vez en Castilla y León, concretamente en la provincia de Ávila. Entonces, la Junta firmó un convenio de colaboración con la asociación de propietarios de los terrenos cinegéticos de la Reserva Regional de Caza ‘Sierra de Gredos’ para incrementar la lucha contra el furtivismo.
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En este sentido, ambas partes acordaron la incorporación de una tecnología de última generación que ayudaría a detectar este tipo de delitos. Hablamos de, como en esta ocasión, el uso de un dron dotado con cámaras térmicas y sistema de vuelo nocturno.
A él se sumaron monoculares de visión térmica y equipos ópticos de alto contraste para unas labores de control más eficaces por parte de los celadores de medio ambiente y agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, además de guardas rurales de la asociación.
