Las imágenes de un podenco que localiza a un conejo entre la maleza y la manera en que resuelve la situación sin necesidad de que el cazador tenga que disparar han arrasado en las redes sociales.

El podenco, como es habitual en los ejemplares de esta razagolpea con sus manos y se asoma por encima del montón de leña en el que sabe que se esconde un conejo.

El perro cubre en todo momento la huida del orejudo y se sube a una linde desde la que divisará mejor los movimientos de la pieza. Su estrategia es clara: acosar al animal sin dejar de mirar, oler y escuchar la posible arrancada de la víctima.

Cuando el orejudo trata de escapar… esto es lo que sucede.

Cómo cazar conejos con podencos entre zarzas y duro monte

conejos
©JDG

Canchos de granito, tomillos, escobas, retamas y zarzales… Sin duda, el podenco. ¿Ibicenco, canario, maneto andaluz o portugués? El que sea, pero a ser posible tamaño medio, tal vez el que dicen portugués. Porque si es grande, entra mal en el zarzal, y si es chico, corre poco; así que ni una cosa ni otra. El canela rojizo de orejas enveladas de siempre. ¿Por qué el podenco es el ideal? Habrá diversas razones, pero quizás la fundamental es la dureza de la caza del conejo en ese medio fragoso y hostil de las cancheras y los zarzales. Te lo contamos en este artículo.

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