Harrison Turner, cazador francés que gestiona la cuenta de Instagram @nativehunterseu, cuenta a Jara y Sedal cómo abatieron este extraño corzo de cinco patas durante una batida con la que cerraban temporada en su coto, situado en el suroeste galo.

«Saltó a última hora de la tarde. El presidente de la sociedad, quien lo cazó, nos avisó de que había algo raro en él», explica el cazador galo. Sus cuernas –aún cubiertas por borra- habían terminado de desarrollarse como se puede ver en la fotografía que ilustra esta noticia, conformando un bonito trofeo –algo inusual para esta zona-, según detalla Harrison.

«Cuando me avisaron de lo que habían cazado y llegué al lugar, el resto de la cuadrilla estaba sorprendidísima y no paraban de tomar fotos», describe. Harrison detalla que esta malformación de su pata no le afectaba a su normal movimiento a la hora de andar, ya que el corzo huía de forma normal de la rehala de perros.

Una malformación durante el desarrollo embrionario

Por su parte el científico Carlos Díez, de Ciencia y Caza, ha explicado a Jara y Sedal que «es una malformación que se produce durante el desarrollo embrionario del animal». Dependiendo de donde se encuentre, «puede que no sea compatible con la vida y muera al nacer o al poco tiempo, como cuando sale algún animal con dos cabezas, por ejemplo», detalla Díez. Sin embargo, otras veces sí que sobreviven –como este caso- porque no afecta a ningún órgano vital. «No es habitual, pero no es algo alarmante tampoco», advierte por último.

El jabalí con seis pezuñas

jabalí
El jabalí con seis pezuñas. © YouTube

Hace unas semanas era protagonista en Jara y Sedal una filmación en la que se puede ver cómo un cazador muestra las patas delanteras de un jabalí que contaba con una doble pezuña en cada una de ellas. Se trata de una malformación que se incluye dentro de las capturas más extrañas de la presente temporada cinegética.

YouTube video

La jabalina con un extraño ‘cuerno’ en su cabeza abatida en Burgos

La extraña malformación del animal en esa zona. / D.G.

Hace un año, los miembros de la Sociedad de Cazadores ‘Pino de Bureba’ consiguieron cazar una jabalina con una protuberancia en la cabeza que parecía un ‘cuerno’ o incluso una pequeña «trompa», como definió entonces en declaraciones a Jara y Sedal el cazador que lo abatió, Diego GarcíaAsí se hicieron con ella.

Sobre el autor