Los cazadores Juan Francisco Villodres y Samuel Romero, naturales de la ciudad malagueña de Antequera, rescataron el pasado fin de semana a un cordero que se había quedado atrapado entre dos rocas en un paraje natural cercano al citado municipio.
Habitualmente, los domingos, ambos cazadores quedan para dar un paseo y fotografiar a los animales del coto. En esta ocasión, se acercaron al paraje natural de El Torcaz, y al llegar a una zona escarpada, escucharon al pequeño cordero en apuros: «Solamente se escuchaba de llamar a la madre, y aunque había algunas ovejas por el lugar, éstas estaban muy apartadas del sitio en el que se encontraba el borrego», explica Romero.
«Al llegar a la roca en la que estaba atrapado, intentamos de toda forma posible sacarlo, a pesar de que era muy estrecho el lugar. No había forma de entrar. Intenté en un primer momento cogerlo con las piernas, pero el animal tendía a irse más adentro. Después metí las manos como pude y lo saqué», relata. «Al sacarlo, el animal se vino con nosotros, porque supongo que entendía que lo habíamos salvado», relata el cazador.
A los pocos metros, tropezaron con la madre: «Fue un encuentro emotivo y un orgullo como cazadores, ya que somos guardianes del mundo rural y de la naturaleza», defiende. «Somos los primeros que miramos por los animales y por la naturaleza», pone de nuevo en valor el joven malagueño.
