El presidente de la Real Federación Española de Caza, Manuel Gallardo, ha solicitado a la Federación Europea de Caza y Conservación (FACE) y al resto de federaciones del viejo continente movilizaciones de cazadores en Bruselas en 2022 ante los continuos ataques de la Comisión Europea (CE) a la actividad cinegética.
La entidad federativa se siente agredida por las nefastas imposiciones de la Directiva hábitat, la directiva aves, la Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, la prohibición de la tórtola común, la prohibición del uso del plomo sin dar ninguna alternativa, el silvestrismo, incluso el intento descarado de prohibir la caza de la perdiz roja.
En un encuentro mantenido con FACE y otras federaciones de caza europeas, la RFEC ha denunciado nuevamente que la Comisión, en su deriva conservacionista y anticaza, ha llevado al centro del debate a la actividad cinegética, cuando la caza no es la mayor causa de la deficiente situación de las especies, ni la pérdida de biodiversidad se solucionará prohibiendo o limitando la actividad.
El presidente de la RFEC, Manuel Gallardo, considera que ha llegado el momento de decir basta ante los continuos ataques de la CE a la actividad cinegética: “Hace pocos días anunciábamos que la gran batalla está cada vez más cerca y no lo decíamos en vano. Tenemos un enemigo muy poderoso que, desde la distancia, nos somete cada vez más a la dictadura ecoanimalista y no lo podemos permitir. En 2022 nos veremos en Bruselas si Europa no cambia su postura”.
Tanto FACE como todos los países que forman parte de la federación europea consideran que ha llegado el momento de demostrar que los cazadores no están dispuestos a doblegarse ante la dictadura conservacionista venida de Europa y que el próximo año deberá realizarse una gran manifestación a las puertas de la Comisión Europea en Bruselas.