Bernardo García Díaz, un joven cazador natural de la localidad salmantina de Santiago de la Puebla, ha compartido en los últimos días, a través de su cuenta de Twitter, el proceso a través del cual se encontró un polluelo de rapaz en apuros debido a que el viento derribó su nido y que, gracias a su esfuerzo, logró salir adelante, algo que provocó decenas de comentarios en Twitter.
Os voy a contar lo que me ha pasado esta mañana, yendo por el camino al lado de un fresno, con la tormenta de viento de ésta noche, una de sus ramas se ha partido, hasta ahí todo normal, da la casualidad de que en esa rama había un nido de águila ratonera si no me confundo, y pic.twitter.com/RPeLrf7QWc
— Bernardo Garcia Diaz 🇪🇸 (@Bernard_GD) June 16, 2022
«Os voy a contar lo que me ha pasado esta mañana», comenzó relatando el pasado 16 de junio, cuando el viento acabó con una de las ramas del árbol. «Yendo por el camino, al lado de un fresno, con la tormenta de viento de esta noche, una de sus ramas se ha partido. Hasta ahí todo normal. Pero da la casualidad de que en esa rama había un nido de águila ratonera, si no me confundo, y allí estaba el polluelo, en el suelo, y al lado de lo que quedaba de nido», añadía el joven. «Estas aves desde pequeño me han fascinado, y dándole vueltas a la cabeza le he improvisado un nido», relataba García Díaz, que además denunció que «en el nido de la madre había una mascarilla».
Sin pensarlo dos veces, el cazador cogió una escalera e improvisó un nido lo más cercano posible a donde estaba: «Allí dejé a ‘Tormenta’, esperando que su madre la encontrase y siguiese alimentándolo, y un día se acuerde de mí», señalaba el día 16, destacando: «Somos la gente del campo quién cuidamos de él y de la naturaleza».
Así estaba el pollo de rapaz seis días después
Este martes, 21 de junio, García Díaz volvió a visitar el lugar, comprobando que «había crecido un montón en seis días». «Los padres parece que han hecho algunas reformas en el nido, añadiendo algunas ramas. Ya quedan disipadas todas vuestras dudas, sigue vivo y en buen estado, solo nos falta verle echar a volar», exponía el joven cazador.
Hoy he visitado a tormenta, ha crecido un montón en 6 días, los padres parece que han hecho algunas reformas en el nido, añadiendo algunas ramas. Ya quedan disipadas todas vuestras dudas, sigue vivo y en buen estado, solo nos falta verle echar a volar https://t.co/Wo8GFPSM8v pic.twitter.com/32B4BGg601
— Bernardo Garcia Diaz 🇪🇸 (@Bernard_GD) June 21, 2022
Algunas de las mejores respuestas a la reacción del joven
Algunos de los comentarios del gesto de este cazador hacían referencia a cómo el sector cinegético mira siempre por la naturaleza: «Venga, Iñigo Errejón, tú que presumes de ecologista échale un ojo a lo que este hombre de campo ha hecho esta mañana. Sin ser ministro, ni consejero de agricultura. Toma nota y deja de decir sandeces», exponía un usuario de esta red social mencionando en el mensaje al político. «Los verdaderos ecologistas, gente como Bernardo, no las parafernalias que se ven por ahí», añadía otro.
Venga Iñigo Errejón, tú que presumes de ecologista échale un ojo a lo que este hombre de campo ha hecho esta mañana.
Sin ser ministro, ni consejero de agricultura.@ierrejon toma nota y deja de decir sandeces. https://t.co/x8Wog0n7J8— Carlos Espinel 💜💜💜🇪🇸🇪🇸🇪🇸 (@CEspinel11) June 16, 2022
Los verdaderos ecologistas,gente como Bernard,no las parafernalias que se ven por ahí https://t.co/IRcfXWftIh
— Jesús María González (@jesusmagon1982) June 16, 2022
La actitud del joven también ha levantado alguna que otra crítica en redes sociales, sobre todo quienes cuestionaban que los padres pudieran recelar de volver al nido al haber tocado el joven al polluelo, si bien el vídeo publicado días después confirmó que, afortunadamente, consiguió lo que se proponía: salvar la vida del animal.