Desde la prohibición del control del lobo en septiembre de 2021 tras su inclusión en el listado de especies silvestres en régimen de protección especial, los ataques al ganado son un problema que va en aumento. Ante esta situación, los perros mastines son una de las pocas herramientas con las que cuentan los ganaderos para combatir los daños del cánido. Por ello, en Castilla-La Mancha han tomado la determinación de subvencionar a los propietarios de estas explotaciones por la tenencia de estos canes.

En concreto, la Junta de Comunidades de esta comunidad autónoma ha aprobado una ayuda de 350 euros por cada mastín que defienda al ganado de los lobos en Guadalajara. La medida fue publicada el pasado miércoles, 8 de marzo, en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha. En sus páginas se recogían las bases reguladoras de una nueva ayuda de apoyo a la ganadería en extensivo: la de mantenimiento y manutención de perros mastines para prevenir ataques de lobos, especialmente importante en la Sierra Norte de Guadalajara.

«Sabemos muy bien lo que es mantener el ganado extensivo en lugares difíciles, en los que se necesita más si cabe el apoyo de la Administración», señalaba dos días antes de su publicación -el pasado lunes- el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, durante una visita al municipio de Sigüenza.

En total, se contempla una cuantía de 350 euros por animal al año y se suma a las ya existentes para indemnizar los daños en el ganado y para prevenir ataques de lobo, que llevan convocándose desde hace años en la región.

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