Cuidar las poblaciones de peces es cosa de todos. Por ello, y para ayudar en esta tarea, debemos practicar la captura y suelta. Aquí van algunos consejos para realizarlo correctamente.
7/7/2017 | Redacción JyS

captura y suelta
Foto: Shutterstock

Antes de pescar

Por supuesto nada de poteras. Sólo debes usa anzuelos simples. Antes de colocar estos debes quitarles la muerte con unos alicates. Es sencillo, solo tienes que presionar con los alicates sobre el arpón hasta comprimirlo.

Durante la captura

Una vez que hayas capturado un pez y lo hayas sacado del agua debes retirar con cuidado, ayudándote de unos alicates, el anzuelo de la boca del animal. Si el pez se ha tragado el cebo será mejor que cortes el sedal y dejes el anzuelo dentro. Hay estudios que demuestran que los peces expulsan de su organismo los anzuelos y se les provoca un daño menor dejándolo dentro que intentando sacarlo.
Otro aspecto importante es aplicar antiséptico en el agujero producido por el anzuelo antes de soltar el pez.

Suelta

Cuando vayas a soltar tu captura debes asegurarte de cogerla de manera correcta. Si pescas en un lugar donde haya corriente de agua debes colocar al pez de cara a la corriente, es decir, ponlo contracorriente. De esta forma te aseguras de que la corriente fluye a través de sus branquias y el animal coge oxígeno para retomar su marcha.
Si, por el contrario, tu lugar de pesca es un lugar sin corrientes, entonces deberás agarrar al pez con firmeza con las dos manos y dibujar ‘ochos’ con él para crear una pequeña circulación de agua que pase por las branquias de igual manera que lo haría si hubiese corriente.

Otras consideraciones

No olvides mojarte las manos antes de tocar los peces, ya que si no lo haces puedes dañar la mucosa que recubre sus escamas y puede ser perjudicial para ellos. Por otro lado, nunca agarres los peces por el labio inferior. Debes ayudarte de las dos manos, poniendo una de ellas en el vientre del animal, para que así su peso descanse sobre tu mano.