El protagonista de esta escena de pesca que vamos a descubrir a continuación se llama Rubén Durán López. Este pescador de 32 años, natural de la provincia de Badajoz, puede presumir de capturar un increíble ejemplar de carpa que, por su tamaño y por su peso, nos ha dejado boquiabiertos.
Los destacados hechos tuvieron lugar el pasado domingo, 21 de abril, en el embalse del Boquerón, ubicado en el municipio de Cordobilla de Lácara. Según nos indica el protagonista, los pescadores de la zona conocen a este animal como ‘Moby Dick’.
Todo comenzó, tal y como ha contado Rubén al equipo de Jara y Sedal, cuando al llegar al embalse «el 19 de abril, sobre las 18:30 horas, junto a tres amigos: Javier Blanco Flores, conocido como ‘Parrita’, Sergio del Pozo Romero y Sergio Sánchez Méndez. «Nos dirigimos a un puesto en el que llevamos pescando las últimas semanas y nos encontramos ya a otros compañeros de afición ocupándolo», ha empezado narrando.
Tuvieron que cambiar su puesto habitual
Por este motivo, pasaron varios minutos decidiendo qué dirección tomar para elegir el nuevo puesto y, finalmente, optaron por ir «a la zona del merendero que hay cercano al chiringuito Los Chozos». «Mientras montaba mi equipo observaba el agua», ha continuado recordando, «en la cual veía que se movían carpas de buen porte por las orillas, a unos escasos tres metros de ella».
«Cuando por fin tenía todo listo me dispuse a lanzar las cañas. Dos de ellas las lancé y con la tercera entré con el vadeador, en el agua, en la zona en la que anteriormente vi movimiento. Me adentré unos tres metros y dejé caer el cebo en una zona que, aunque había algunas algas, me pareció buen sitio», ha narrado Rubén.
Asimismo, el pescador ha detallado que «no había más de un metro o 1,20 de profundidad». Decidió usar un cebo artificial, «unos maíces gigantes dobles en color rosa fluoro que apenas tenían aroma».
A la segunda fue la vencida
«A la mañana siguiente», ha añadido» se activó una de mis alarmas a las 07:50 horas, aproximadamente. Era la caña que había dejado tan cerca de la orilla». Después de una «bonita lucha» resultó ser una carpa común de 10 kilogramos.
Como su cebo artificial y el bajo utilizado estaban «en perfecto estado», lo volvió a dejar caer en el mismo sitio. No volvió a activarse ninguna otra alarma en todo el sábado hasta que, a las 01:45 horas, comenzó a sonar de nuevo la de la misma caña.
«Yo salté de la cama y salí corriendo hacia ella, que ya había dejado de sonar. Al llegar vi la pesa para picada trasera totalmente abajo. Aún dormido no sabía que hacer» ha confesado. Su compañero ‘Parrita’ le dijo que el hilo iba en sentido contrario a donde dejó caer el cebo.
Ese mismo amigo entró al agua «para recibirla, pues el animal no se dejaba ver, no subía a la superficie en ningún momento», ha explicado Rubén. «Después de unos momentos, por fin apareció llegando a la orilla y ‘el Parrita’ me dijo que había cogido a ‘Moby Dick’».
«Una vez que el pez estaba en la sacadera, desperté a los otros compañeros para que vinieran a ayudarnos y cuando llegaron a la orilla se quedaron tan sorprendidos como yo. Procedimos a poner al animal en la cuna de recepción para poder admirar algo tan increíble. A la mañana siguiente, poco a poco fue llegando mucha gente para ver al animal».
Capturan una enorme carpa de 29 kilos en un embalse de Badajoz
Tras confirmar que, efectivamente, se trataba de la ‘Moby Dick’, le hicieron las curas y el pesaje y «salió la sorprendente cifra de casi 34 kiloframos», ha detallado el pescador. Tal y como muestra el propio pescador en el vídeo que vamos a ver a continuación y que Extremadura Noticias ha difundido a través de su cuenta de Facebook, posteriormente procedió a soltar al ejemplar.
«Para que sigamos cumpliendo sueños todo el mundo y que podamos sacar este tipo de peces en este tipo de embalses», ha pronunciado Rubén mientras suelta a la capar, no sin antes darle un beso de despedida y agradecimiento por la escena que le ha hecho vivir.
