La polémica ha estallado tras la publicación de un vídeo en el que un joven animalista, conocido como Xavi Animal, se graba mientras destruye un puesto de caza y lo lanza por un barranco. En la grabación, compartida originalmente en el perfil del joven, el activista celebra sus 300.000 seguidores con un acto que ha encendido a numerosos usuarios en redes sociales.
El vídeo comienza con el joven asegurando: «Soy Xavi animal. Acabamos de llegar a 300.000 seguidores de puro activismo y ¿sabéis cómo lo vamos a celebrar?». A continuación, se le ve empujando una caseta de avistamiento de fauna que acaba por precipitarse ladera abajo junto a una silla. Mientras se aleja, lanza un insulto explícito a los cazadores, visiblemente alterado.
Ataque directo a la actividad cinegética
En la misma grabación, un acompañante le señala que no ha explicado qué era exactamente lo que ha destruido. El animalista lo aclara entonces mientras muestra una señal que advierte de la presencia de cazadores en fines de semana y festivos por motivos de seguridad. Se mofa de ellos y añade: «Si hay algún cazador por aquí que me sigue y se ofende… iros a mentir a otro lado».
Este nuevo ataque, lejos de ser un caso aislado, se suma a una escalada de boicots organizados contra la caza legal que se están registrando en diferentes zonas del país, muchos de ellos con una clara estrategia de difusión en redes sociales con el objetivo de generar visibilidad y seguidores.
Multas por sabotear cacerías
Este tipo de actos no salen gratis. Destruir infraestructuras cinegéticas puede acarrear multas que oscilan entre los 600 y los 10.000 euros, dependiendo del valor del daño y del perjuicio causado. En casos donde se considere delito contra la propiedad, puede incluso conllevar consecuencias penales.
Comunidades como la Valenciana ya han empezado a tomar medidas legales contra el sabotaje cinegético. En 2023, la Generalitat multó a varios activistas por boicotear batidas autorizadas, y no se descarta endurecer aún más las sanciones para proteger a quienes ejercen esta actividad de forma legal y regulada.
¿En qué comunidades autónomas multan por boicotear una cacería?
El vídeo termina con un mensaje que reza: «Los animales son alguien, no algo». Xavi anima a sus seguidores a hacerse veganos y afirma que los animales «son individuos» que merecen respeto. Sin embargo, para buena parte de la sociedad rural, lo que ha hecho no es activismo, sino un acto de vandalismo contra el campo y la actividad que regula las poblaciones de especies que causan numerosos daños y accidentes como los jabalíes.
